Sin duda el alicantino David Ferrer actual puesto número 5 en el ranking de la ATP recordará con emoción éste 2012 ya que el mismo se ha convertido en el mejor año de su carrera. Desde Enero, cuando se consagró en Auckland hasta noviembre donde logró el primer master 1000 de su carrera en Paris Bercy.
- Ferrer se consagra campeón del Master 1000 de París Bercy
- Programa especial de NOSTRESPORT TV sobre David Ferrer y el Valencia Open 500
Ezequiel P. Pernica | NOSTRESPORT.COM
Sin duda el alicantino David Ferrer actual puesto número 5 en el ranking de la ATP recordará con emoción éste 2012 ya que el mismo se ha convertido en el mejor año de su carrera. Desde Enero, cuando se consagró en Auckland hasta noviembre donde logró el primer master 1000 de su carrera en Paris Bercy.
Todo comenzó en enero cuando el gladiador de Jávea viajó a Auckland, Nueva Zelanda, para la gira previa por Oceanía, la antesala de primer Grand Slam del año, el Austaralian Open. Allí logró su primer título de éste año venciendo al belga Oliver Rochus en dos sets por 6-3 y 6-4. Auckland le sentaba bien, lograba su tercer torneo allí luego del 2007 y 2011.
El segundo título vendría tan solo al mes siguiente en Buenos Aires, en el ATP 250 que se realiza en Lawn Tenis Club de la capital argentina. Allí venció a su compatriota Nicolás Almagro (como en Acapulco 2011) por 4-6, 6-3, 6-2.
Al mes siguiente festejaría por tercera vez. La gira latinoamericana de tierra batida le sentaba bien. 6-1, 6-2 para vencer a otro compatriota, a Fernando Verdasco ésta vez y ser bicampeón en el Open 500 Acapulco, México.
Abril y mayo cortaton su racha de un título por mes, pero en junio llegó la mini etapa de hierba previo a Wimbledon y Ferrer llegaba on fire al tercer Grand Slam del año. Conseguía su cuarto trofeo del año en Hertogenbosch, Holanda, título que ya había logrado en 2008. Allí le ganó al alemán Philipp Petzschner en dos sets por 6-3, 6-4.
Julio le permitio seguír en racha. Vino BAstad en Suecia y como en el 2007, vovlió a hacerse con el torneo. Un doble 6-2 le permitió vencer por segunda vez en el año en una final a su amigo Nicolás Almagro y mantener su racha invicta con el murciano. Pero luego llegaron los juegos olímpicos.
Recién en octubre volvería a coronarse. En su casa, con el aliciente del retiro de uno de sus mentores, Juan Carlos Ferrero. El alicantino se consagraría campeón en el Ágora de la Ciudad de las Ciencias y las Artes en la capital del Turia por tercera vez en su carrera tras vencer al ucraniano Alexandr Dolgopolov por 6-3, 1-6, 6-4.
Tán solo a la semana siguiente viajó a Paris Bercy para el último Master 1000 de la temporada y logró lo que tanto ansió por mucho tiempo. Logró su cuenta pendiente, su primer Master.Venció al jóven polaco Jerzy Janowicz, proveniente de la qualy y revelación del torneo por 6-4, 6-3 y conquistó el sueño. Finalizó un brillante 2012 con el 7mo título en su haber, y logrando su cuenta pendiente luego de caer tres veces en una final. (Roma 2010, Montecarlo 2011 y Shangai 2011).
Lógicamente, no todo ha sido alegrías. Quedó con la ilusión de llegar más lejos en los Grand Slam, al menosa alcanzar la final. En el primero del año en Melbourne, llegó a Cuartos de Final cayendo ante Novak Djokovic, que luego sería campeón tras ganarle a Nadal en la final más larga de la historia del torneo australiano con casi 6 horas de tenis. En Roland Garros llegó a semis, pero se encontró con otro que más tarde sería el campeón del campeonato, el implacable Rafa Nadal. En Wimbledon, otro finalista lo dejaría afuera, Andy Murray, en cuartos. Y finalmente en el US Open, llegó a semis pero Djokovic lo volvería adejar afuera de un GS por segunda vez en el año.
Quedó también pendiente repetir un título con la camiseta española. En Londres 2012 se quedó con ganas de llegar más lejos en singles o en dobles para quedarse con alguna presea y decír presente en el podio olímpico.
Y a pesar de haber mostrado un nivel superlativo y de haber vencido a Berdych y a Stepanek con autoridad, no fue suficiente para alcanzar la sexta Copa Davis. Sin embargo, la lesión de Nadal sirvió para caer en la cuenta de que España con Ferrer y sin Nadal, se las ha apañado tranquilamente para llegar a la final casi sin zozobras. Ha sido la nave insignia de la armada española y su papel protagónico no le ha pesado en absoluto.
Ahora Ferru brinda agradeciendo por un excelente 2012 y por un mejor 2013. Quizá cuando el reloj marque las doce en Alicante (o dónde quiera que pase las fiestas) y levante la copa para brindar pida por el sueño de cualquier tenista, lograr un Grand Slam.
Ferrer se consagra campeón del Master 1000 de París Bercy
Programa especial de NOSTRESPORT TV sobre David Ferrer y el Valencia Open 500
