El Valencia se lanza definitivamente a por Tino Costa. El dinero que va a ingresarle el Manchester City a cambio de los servicios de David Silva permitirá a la entidad acometer el fichaje del argentino por una cantidad que se situará entre los 6 y 7 millones de euros.
David Gutiérrez | NOSTRESPORT.COM
El Valencia acelera de nuevo el pistón en lo que a incorporaciones se refiere. Las ventas de David Villa, David Silva y Nikola Zigic permiten a Manuel Llorente hacer algo que no conseguía desde hace tiempo: abrir la caja de caudales de la entidad y observar en ella dinero. Parece una perogrullada, pues ¿para qué sirve una caja fuerte si no es para salvaguardar billetes y monedas? No obstante, por desgracia, no es tan obvio en el club de Mestalla. De hecho, lo que hasta en los últimos años era normal era más bien lo contrario, es decir, abrir la caja fuerte y encontrarse con un desasosegante vacío metálico.
El caso es que con los pases de los atacantes a Barcelona, Man City y Birmingham, respectivamente, el Valencia Club de Fútbol ha recaudado alrededor de 80 millones de euros, cifra aliviante para acometer la planificación de la temporada y, ya de paso, guardarse un buen pellizco para la hucha, que mucha falta hace.
El nuevo protagonista de la actualidad blanquinegra no es otro que el futuro sustituto de Rubén Baraja: Alberto “Tino” Costa. El Valencia ha decidido lanzarse a cerrar el traspaso del joven mediocentro argentino del Montpellier gracias al líquido que en inminentes fechas va a llegar vía Manchester. Llorente espera cerrar rápidamente la operación por un montante que rondaría los 6 millones de euros y convertir al organizador zurdo en el quinto fichaje che para la próxima temporada.
Si, como se prevé, el equipo de Mestalla culmina la contratación de Tino Costa, tan sólo quedará la delantera como posición prioritaria a reforzar, pues en la actualidad Unai Emery sólo cuenta con Roberto Soldado como ariete de la primera plantilla.
Aparte del fichaje necesario de una pareja de baile para Soldado, las demás contrataciones que se pudieran producir estarán siempre supeditadas a las no menos importantes bajas de jugadores que, además de no contar para el técnico de Hondarribia, engordan la lista de efectivos de la primera plantilla hasta las cuatro decenas, cifra insostenible para el club.
