Los dos tantos anotados por el jugador del Atlético clasifican a la selección francesa para la final, frente a una Alemania que ofreció la mejor exhibición del torneo durante la primera parte.
Porque, hasta el primer tanto de Francia, los germanos demostraron su espíritu de campeona del mundo con un juego excelso, en el cual Ozil y Kross fueron protagonistas en el equipo teutón. Junto a ellos, la sorpresa en el once, Can, se mostró muy acoplado al esquema de posesión.
Durante la primera parte, Lloris tuvo que emplearse a fondo para salvar a su equipo frente a Can, Schweinsteiger y Muller, que llegaban al área tras buenas jugadas de combinación.
Pero, sin duda, el problema de Alemania fue la escasez de goleadores. Con Gómez lesionado y Muller sin puntería durante todo el campeonato, los teutones no fueron capaces de materializar sus continuas llegadas. Y es que, durante más de media hora, parecía que Alemania podía volver a rematar a un anfitrión a base de perfección futbolística, como ya hizo con Brasil en el anterior Mundial.
Sin embargo, en el descuento de la primera parte, Schweinsteiger, capitán alemán y una de las figuras del equipo en la última década, cometió un penalti tan evitable como riguroso. Ante esta encrucijada, Rizzoli, que antes no señaló un penalti a favor de los germanos, esta vez indicó el punto fatídico. De esta manera, Griezmann anotó con un golpeo de calidad para poner a Francia más cerca de la final.
Dominio sin puntería
Durante el segundo tiempo, Alemania no volvió a encontrar la frescura que exhibió en el primer acto. Parecía que el tanto del jugador del Atlético había enterrado las ideas de los jugadores de Low. Pese a ello, los teutones siguieron acechando el área de Francia, que se encomendó a Griezmann para salir al contragolpe.
Con el marcador en contra, el técnico germano introdujo a Gotze y Sané para empatar el encuentro. Sin embargo, Pogba hizo una gran jugada en la banda, centró para Giroud, quién despistó a Neuer, y Griezmann remató en el área para agregar más ventaja al resultado.
De ahí al final, Alemania creó a peligro a balón parado, pero Mustafi, Kimmich y Howedes no acertaron a anotar el gol de la esperanza, y la agonía germana fue creciendo al ver como se les escapaba otra final de la Eurocopa, como sucedió hace 4 años frente a Italia.
Así, el partido terminó y con él la mejor exhibición de toda la Eurocopa, el partido que se recordará para siempre. Porque Alemania fue fiel a su estilo y realizó un primer acto brillante, al nivel de sus mejores encuentros. Entrenados por Low desde hace una década, y tras 6 semifinales alcanzadas de manera consecutiva, todo apunta a que volverán a ser temibles en el Mundial de Rusia.
De hecho, los amantes del fútbol agradecerían que Alemania siguiese en esta línea de buen juego, porque han vuelto a ser protagonistas en un gran torneo. Pese al dolor de la derrota, deberían irse satisfechos por haber sido, de nuevo, un digno rival. Posiblemente, el mejor equipo del campeonato.
Pero esta noche, y durante este mes, los franceses se vanaglorian en su dicha futbolística. Afortunadamente para ellos, cuentan en sus filas con un jugador de clase mundial que ya fue decisivo en el Atlético de Madrid durante la temporada. Ahora, como líder deportivo y espiritual de esta selección, ha tomado las riendas del equipo para llevar a los suyos a una nueva final.
Y es que, desde Zidane, el ‘gallo francés’ no había vuelto a volar alto en una competición. Atrás quedan los desastres de anteriores torneos, ahora solo queda la felicidad. Porque es el nuevo maestro galo, el que ha devuelto la ilusión al país. Es Griezmann, el ‘principito’ que está emulando a Platini y al actual técnico del Madrid en su camino para convertirse en leyenda.
Solo falta una piedra más, la Portugal de Cristiano. Hasta el domingo, solo queda especular, pero se preveé un encuentro de altura que decidirá, además del campeón, al nuevo emperador del fútbol europeo: Griezmann o Ronaldo.
Ficha técnica
Goles: 0-1, Griezmann de penalti (min 46); 0-2, Griezmann (min 71)
Francia: Lloris; Sagna, Koscielny, Umtiti, Evra; Pogba, Matuidi, Sissoko, Payet (Kanté, min 70), Griezmann (Cabaye, min 91) y Giroud (Gignac, min 77).
Alemania: Neuer; Kimmich, Boateng (Mustafi, min 60), Höwedes, Hector; Can (Gotze, min 66), Schweinsteiger (Sané, min 78), Kroos, Draxler, Özil y Müller.
