El pasado domingo, la serpiente multicolor que recorre España durante tres semanas en bicicleta, finalizaba el pasado domingo en la estación de esquí aragonesa de Valdelinares, en pleno corazón del Sistema Central. Alberto Contador, Alejandro Valverde, Chris Froome, Nairo Quintana, Joaquim Rodríguez y Rigoberto Urán retomarían el duelo de Cumbres Verdes por el liderato de la carrera.
El ambiente que rodea una llegada en alto es muy distinto al de una etapa llana; grupetos de ciclistas de todas las edades subiendo el puerto, aficionados tatuando en la carretera el nombre de sus ídolos actuales y los que siempre permanecerán en nuestro recuerdo (como Marco “el Pirata” Pantani) y sobre todo una pasión que une a todos los presentes, el ciclismo. Ni la tormenta ni el granizo hizo que muchos se fueran a casa, sino todo lo contrario, venían más aficionados, la espera iba a valer la pena. Esa circunstancia meteorológica cubrió los ocho mil metros de subida con tintes de que algo especial estaba a punto de ocurrir en esa carretera.
La etapa del día cubría la distancia entre Carboneras y Valdelinares, un total de 185 kilómetros, pasaron localidades como Cañete, Teruel o Mora de Rubielos antes de llegar a la cima de primera categoría. Winner Anacona y Javi Moreno lideraban un grupo de 30 corredores escapados que contaban con una ventaja alrededor de los tres minutos y medio. El español comenzó a poner un ritmo duro en el que parecía que Anacona no podría con el de Movistar, pero el colombiano engañó a todos y se abría paso entre los aficionados que se daban en Valdelinares hacia su primera victoria en una de las tres grandes vueltas ciclistas.
Detrás, el equipo Sky buscaba endurecer la subida, pero tras un arreón de Tony Martin para Urán, seleccionaba ya a los mejores de la Vuelta, que se miraban unos a otros a ver quién iniciaba las hostilidades. No podía ser otro, tras fracturarse la tibia en el pasado Tour de Francia, Alberto Contador atacó para deleite de los aficionados que estaban animando bajo la lluvia.
El de Pinto arrancó a falta de dos para meta, rompiendo el grupo y dejando atrás al grupo de favoritos, pero Nairo no se dio por vencido y saltó del grupo, arrastrando a “Purito” y a su escudero Vorganov. Mientras que Froome, Valverde, Fabio Aru y Urán no pudieron responder a ese cambio de ritmo del colombiano de Movistar.
Con Anacona ya cruzando la línea de meta, sólo quedaba esperar al grupo de favoritos y sus diferencias. A pesar de su valentía, Contador no pudo arrancar diferencias con Quintana y Rodríguez pero si respecto a Froome, Valverde y Urán. La batalla está servida, ahora toca disfrutar del espectáculo que ofrezcan estos ciclistas.
El día lluvioso no empañó la epicidad que conlleva estas subidas y los aficionados pudimos comprobar de primera mano la dureza, la emoción y lo bonito que puede llegar a ser este deporte si de verdad lo sientes.
