Vuelan a cuartos (2-2)

El Villarreal estará en cuartos de final de la Copa del Rey por cuarta vez en su historia tras superar la eliminatoria contra la Real Sociedad. En un partido de vuelta vibrante, el submarino supo controlar el juego. Se avanzó dos veces por mediación de Gerard y Gio, aunque la Real reaccionó y lo intentó hasta el final. El Getafe será el rival en cuartos.

Tres temporadas han pasado desde la última aparición del Villarreal en cuartos de final. Pero comparando esta ocasión con las tres veces anteriores que se dejó caer por allí, la próxima que va a disputar parece la más ilusionante. La posibilidad de acariciar las semifinales -nunca antes disputadas- está más cerca que nunca. El submarino amarillo superó a la Real en una eliminatoria seria. Los hombres menos habituales de Marcelino respondieron a la perfección y retuvieron el pase, que nunca peligró.

Un gol al descanso da vida a la Real

La Real salió dominando casi por obligación, mientras los castellonenses aguardaban, inteligentes, a que una contra les diera parte de la sentencia que necesitaban. Y así fue. El guardameta argentino Rulli, una de las revelaciones de la Liga, salvó a la Real en una primera acción. Trigueros la empalmó con todo pero el portero repelió, rápido. Unos instantes después, cuando Gerard Moreno se encargó de la situación, no hubo arquero que detuviese su definición pulcra e pegadita al palo. Recepción, recorte, disparo con bote en área pequeña y gol.

Los donostiarras veían la montaña más alta que nunca. Tenían que marcar tres goles y, viendo los bajos ánimos y la poca intensidad, parecía difícil. Sin embargo, antes del descanso, un gol de Carlos Vela a la salida de un córner daría empuje a la Real. La reanudación fue impetuosa. El submarino pensó que amilanarse era muy peligroso y optó por disputarle el balón a los vascos para volver a dar un puñetazo encima de la mesa lo antes posible. Los minutos pasaron y los locales apretaron cada vez más.

Locura en los últimos veinte minutos

El problema para los de David Moyes era la casi absoluta falta de peligro sobre la portería. El dominio era estéril y Gio aprovechó para acabar con su sequía y dejar la eliminatoria casi sentenciada tras un error de la defensa txuriurdin. Pero la Copa mola demasiado y un minuto después Vela hizo magia para dejar a Granero solo ante Asenjo. El «pirata» marcó un golazo y la grada estalló. Todos allí volvieron a verlo posible y los últimos quince minutos volvieron a disputarse en área amarilla.

Mateo Musacchio, que volvía tras su lesión, se impuso la expulsión más inteligente de su vida. El argentino derribó a Agirretxe en la frontal cuando este ya le había hecho un ocho para marcharse solo. El submarino resistió diez minutos con un hombre menos y la Real apenas supo chutar. Marcelino lo celebró al final. El mejor Villarreal de los últimos años, con 14 partidos seguidos sin perder, tiene una oportunidad histórica para meterse en semifinales de Copa.