Después de siete días, 450 kilómetros y unos kilos menos, el triatleta Apolo Esperanza acabó el reto junto a su compañera del club Turyciclo, Ana Vidaurre, convirtiéndose así en los dos primeros valencianos en llevar a cabo esta travesía junto al Círculo Polar Ártico en tierras Finlandesas
Redacción | NOSTRESPORT.COM
Después de siete días, 450 kilómetros y unos kilos menos, el triatleta Apolo Esperanza acabó el reto junto a su compañera del club Turyciclo, Ana Vidaurre, convirtiéndose así en los dos primeros valencianos en llevar a cabo esta travesía junto al Círculo Polar Ártico en tierras Finlandesas.
Apolo Esperanza describía así esta semana de aventura: “Han sido siete días de esfuerzo casi al límite diario, con etapas de hasta 12 horas sin parar de esquiar más que en los avituallamientos durante breves instantes, soportando temperaturas cercanas a los -15ºC durante muchas horas seguidas y con días en los que no paró de nevar, esquiando sobre lagos, e incluso sobre el mar Báltico helado, pero también han sido siete días de contacto con la naturaleza más salvaje de Laponia y sus gentes, y compartiendo experiencias con otros participantes, básicamente rusos, canadienses, noruegos, finlandeses, suecos y estadounidenses”.
La travesía más larga del mundo
El Border to Border está considerada la travesía más larga del mundo de esquí nórdico. Arranca como su nombre indica en inglés en una frontera, la de Rusia, cerca de la ciudad de Kuusamo, para entrar en la Laponia Finlandesa y llegar hasta la otra frontera, Suecia, en la población limítrofe de Tornio.
“Ha habido noches que nos hemos tenido que hospedar en aldeas en medio de la Taiga –comentaba Apolo–, sin más habitantes que una docena de aldeanos, además de los osos, lobos y otros animales que habitan los parques naturales que hemos cruzado, eso sí, lo que no falta en Finlandia ninguna noche es una sauna”.
Los momentos más críticos han sido aquellos en los que la noche se echaba encima y los organizadores tenían que cerrar el control de carrera para evitar riesgos, en alguno de estos momentos, Apolo y Ana renunciaron y continuaron esquiando, en la helada noche finlandesa, alumbrados por el resplandor de la luna y las lejanas luces de la motonieve de control.
El reto ha sido el tercero de cinco, uno por continente que Apolo llevará a cabo, en distintas disciplinas deportivas; el siguiente en Tierras Tibetanas, el TransHimalaya en Mountain Bike, en agosto. Apolo ha contado con el apoyo de la tienda “Altarriba” para el material de esquí.
