Victoria importante del Valencia en San Mamés (1-2). Jonás Gonçalves se convirtió en el protagonista del partido al anotar el gol del triunfo. Llorente adelantó al Athletic, y Mata empató la contienda. Muñiz Fernández no señaló dos penaltis para el conjunto che, pero luego le perdonó la expulsión a Navarro.
David Gutiérrez | NOSTRESPORT.COM
El Valencia se llevó una victoria de San Mamés merced al acierto del último en subirse al barco: Jonás Gonçalves. El delantero brasileño marcó su primer gol con el equipo blanquinegro para certificar una remontada que puede proporcionar a los che el empujón definitivo para conseguir la clasificación para la Liga de Campeones.
Un partido complicado y épico el de la Catedral. Los locales salieron más hambrientos, más activos. Mucho más enérgicos que el Valencia, maestro y genio de los comienzos a fuego lento. A base de desmarques de su incansable Toquero llevaron de cabeza a los centrales valencianistas (el partido de Navarro fue, como mínimo, desafortunado) y a un Guaita que volvió a hacer de las suyas.
Por eso las primeras opciones fueron bilbaínas, y por eso Llorente adelantó a su equipo sin haber llegado todavía al minuto 25. El espigado ariete recibió de espaldas dentro del área y, con la ayuda de la pasividad de los defensores valencianistas, se revolvió e inauguró el marcador.
Un desequilibrio que por fin espabiló a los de Emery, que comenzaron a progresar y a comerle terreno al Athletic. Ahí llegó la primera clara opción valencianista, que tuvo a Joaquín como fallido protagonista en un mano a mano con Iraizoz. En la continuación de la jugada, Soldado pidió penalti del propio guardameta vasco, a lo que Muñiz Fernández hizo oídos sordos.
Más claro pareció el uso de la mano de Ekiza dentro del área en una acción posterior, que tampoco fue motivo de pena máxima para el colegiado asturiano. Eran los últimos compases de una floja primera parte del Valencia, incapaz de frenar con expedición las escaramuzas del “Lehendakari” y los balones a la cabeza de Llorente.
Mucho mejor fue la segunda mitad. Cierto es que Navarro debió de ser expulsado por un codazo al delantero mundialista, que éste estuvo también a punto de sentenciar al estampar un balón al palo, y que varios contragolpes pudieron cerrar el partido, pero los blanquinegros salieron con las ganas necesarias para darle la vuelta a la situación. Esto ocurrió, a la postre, en parte también gracias al pleno acierto de Unai Emery en los cambios. Tino Costa y Jonás fueron vitales, y dieron otro ritmo a su equipo, que con la mejora de Joaquín y la merma de las fuerzas de los locales, sí que consiguió dominar el choque.
Un encuentro que se puso a favor con el primer zarpazo valencianista de la noche, obra de Mata a pase del gaditano, en una gran jugada colectiva de los che. El segundo, la estocada para los bilbaínos, llegaría tras un misil de Tino Costa que no supo blocar Iraizoz, y que Jonás empujó para provocar el éxtasis de los valencianistas.
Los de Caparrós lucharon a la desesperada por empatar la contienda, pero los puntos ya habían reservado vuelo hacia el este. Concretamente, a Valencia. Equipo de Champions que detonó San Mamés. Cuadro que sabe sufrir y, siempre a su manera, sacar las castañas del fuego.
Ficha técnica:
Athletic Club: Iraizoz; De Marcos, San José, Ekiza, Koikili; David López (Susaeta, min.72), Gurpegui, Javi Martínez, Muniain (Díaz de Cerio, min.83); Toquero (Gabilondo, min.75) y Llorente.
Valencia CF: Guaita; Bruno, Stankevicius, David Navarro, Mathieu (Jordi Alba, min.73); Topal, Banega (Tino Costa, min.77); Joaquín, Mata, Pablo Hernández (Jonas, min.63); y Soldado.
Goles: 1-0, min.14: Llorente. 1-1, min.71: Mata. 1-2, min.81: Jonás.
Árbitro: Muñiz Fernández (Comité Asturiano). Mostró tarjeta amarilla a los locales Muniain, Llorente y De Marcos, y a los visitantes Topal, Soldado, Bruno, Stankevicius y Tino Costa.
Incidencias: Unos 35.000 espectadores en San Mamés. Vigésima quinta jornada de Liga BBVA.
