Cuando acaba el año todo el mundo ya está pensando en el Dakar. La emoción del deporte mezclado con la aventura más extrema.
El camión de asistencia cargado con todo el material necesario y las motos recorren 1.700 km hasta Le Havre (Francia), allí embarcan hacía Buenos Aires, último paso antes del Dakar.
Oficialmente el Dakar 2015 arranca el próximo 3 de enero con el podio de salida, acto de presentación, al pie del palacio presidencial, la Casa Rosada, pero los equipos y pilotos que compiten en la prueba reina del calendario ya llevan recorridos miles de kilómetros hasta llegar a la salida.
Los próximos, los necesarios para llegar hasta Le Havre, Francia, donde embarcan motos, material y camión de asistencia en un MV Grande junto con otros 700 vehículos, rumbo a la zona portuaria de Euroamérica muy cerca de la ciudad bonaerense.
El camión de asistencia, con Manolo Díaz a la cabeza, junto con otro vehículo tirando de un remolque con las tres motos, supervisado por José Ruíz, uno de los mecánicos del equipo, parte a primera hora de la mañana. En el horizonte dos destinos, el más inmediato, el puerto de Le Havre en Francia, en la alta Normandía, y el más lejano, el puerto de Buenos Aires donde llegará, unos quince días después, todo el cargamento necesario para competir en el Dakar.
En total más de 12.700 km que reafirman, el tan repetido dicho entre los motards, que lo realmente difícil es poder llegar a estar en la salida del Dakar, haciendo alusión al arduo trabajo que tienen que completar durante todo el año de preparación, puesta a punto de motos, contactos con patrocinadores etc. Nada más llegar al puerto francés, la organización del Dakar somete al camión, motos y material a diferentes verificaciones, para comprobar que está todo correcto para iniciar su viaje a la prueba más dura del mundo de los raids. Después, todo el material tiene que pasar por las aduanas francesas, y a su llegada, por las argentinas.
Organización minuciosa
El camión fundamentalmente está dividido en tres partes. Una primera parte que sería el taller con un gran grupo electrógeno de 13 kilovatios modelo HYW-13 T5 motorizado por Yanmar, lo que da la energía, un gran compresor de aire con mucha capacidad y mucha presión porque es lo que quita el polvo y limpia los vehículos.
Este año como novedad un depósito de agua de 500 litros con una máquina para poder limpiar bien los vehículos. Una segunda parte donde va todo almacenado en cajas compartimentadas y herméticas.
Todo lo que rodea a esta prueba de resistencia es llamativo y espectacular, por lo que sólo falta disfrutar.