El Villarreal ha presentado sus 2 fichajes en el mercado de invierno: Óliver Torres, procedente del Atlético de Madrid; y Joan Román, del Barcelona. Ambos llegan cedidos hasta final de temporada sin opción de compra.
El acto también ha contado con la presencia del presidente amarillo, Fernando Roig, que ha indicado que, tras llegar a los 40 puntos gracias al triunfo de ayer frente a Osasuna, “es hora de marcarse otros retos, y éstos pasan por la clasificación europea”.
Roig ha apuntado que “toca mirar a cotas más altas, y los 12 puntos que se sacan al octavo clasificado muestran que podemos pelear por Europa. Nuestro objetivo es el cuarto puesto y vamos a aspirar por ello”.
De cara a lograr esta clasificación europea llegan los 2 refuerzos, que se han mostrado agradecidos por la confianza mostrada por los amarillos.
Así, Óliver ha explicado que “cuando surgió la oportunidad de venir al Villarreal no dudé ni un segundo, porque sabía que me iban a tratar bien y su juego se amolda a mi estilo”. El de Navalmoral de la Mata ha indicado además que “mi objetivo es seguir creciendo y apretando fuerte”.
El excolchonero también ha apuntado sobre su lesión (está recuperándose de una luxación en el hombro) que “espero volver pronto” y ha valorado el hecho de lucir el dorsal 19, número mítico portado durante años por Marcos Senna: “Ha sido todo un referente y sé que es una responsabilidad grande, pero trataré de darle mi puntito”.
Por su parte, Joan Román se mostraba ilusionado por “el gran paso dado para poder jugar en Primera, y además en un gran equipo como el Villarreal”. El de Reus ha recordado que “una de las razones por las que vine es por la confianza que se da a los jóvenes, algo que luego se ve reflejado en el terreno de juego”.
Para finalizar, el canterano culé se ha mostrado confiado en poder debutar cuanto antes, sin importarle la posición, ya que “me siento cómodo en cualquier puesto de ataque y espero poder replejarlo logrando muchos goles”.
