La sede de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana está siendo registrada por la Guardia Civil durante el día de hoy.
Por la mañana ha saltado la liebre. El cuerpo policial detenía a Ángel María Villar, el presidente de la Real Federación de Fútbol, su hijo Gorka Villar y al vicepresidente Juan Padrón en una operación contra la corrupción. La operación ‘Soule’, como así se ha bautizado a esta investigación en referencia a un juego de pelota francés de la Edad Media, se ha cobrado sus primeras víctimas, pero podrían ser muchas más.
Las primeras pesquisas de los investigadores acusan a Villar de impulsar partidos de la Selección Española y de otras selecciones a cambio de contraprestaciones para así enriquecer ilícitamente a los altos cargos de la dirección por la organización de estos encuentros. No sólo eso, también se le acusa de usar dinero de manera indebida de la RFEF para usos desleales. Es decir, Villar, supuestamente, habría destinado determinadas cantidades monetarias a distintas delegaciones territoriales con el único objetivo de tener su apoyo incondicional en la reelección. Recordemos que Ángel María Villar lleva a cargo de la federación 29 años ininterrumpidos, ganando las 8 últimas elecciones.
En este marco podría estar involucrado el presidente de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana, Vicente Muñoz. La UCO (Unidad Central Operativa de la Guardia Civil) se ha personado en la sede de la federación para revisar toda la documentación y facturación que pueden estar relacionados con este caso. Según apunta el diario ‘Las Provincias’ , los investigadores han acudido a su casa particular para averiguar la relación existente entre ambos mandatarios y la FFCV. Muñoz ocupa el cargo desde 1986.