El Levante ve como se alejan sus primeras espadas para reforzar la delantera
Tres opciones tenía el conjunto azulgrana para completar un ataque digno de un equipo de primera división, Rubén Castro, Loïc Remy y Arouna Koné. A día de hoy, parece que ninguno va a enfundarse la elástica del Levante.
Cierto es que ninguna era fácil, más bien todo lo contrario, pero sorprende que a seis días de que se cierre el mercado, la dirección deportiva no haya dado más pistas para reforzar uno de los puntos más débiles del equipo en esta temporada.
Las situaciones de Rubén Castro y Koné se resumen en que los clubes a los que pertenecen no les han dejado salir. En caso del costamarfileño, primera opción de Tito y Carmelo, se había llegado a plantar delante de su presidente para aceptara la suculenta oferta de 1’7 millones procedente de Orriols. Sin embargo, Koné disputó los 90′ del último partido del Sivasspor y vino a disipar cualquier duda referente a su futuro más inmediato.
La de Remy quizá era la operación más difícil de llevar a cabo por la situación de su actual club, la UD Las Palmas. Con el acuerdo con el punta realizado, quedaba convencer al conjunto insular cuya posición desde un principio- según la Cadena Ser en palabras de su propio presidente- es que en España no iba a jugar. La oferta presentada por el Levante y el convencimiento del jugador en seguir jugando en la liga, llevó a Las Palmas a llegar a un entendimiento con los blaugrana. Este entendimiento se quedó en que el Levante pagaba la mitad del sueldo de Remy (aproximadamente 700.000 euros) más una cláusula de compra obligatoria por 1’5 millones sujetada a la permanencia granota. Sin embargo, una oferta mareante del Trabzonspor le ha hecho dudar.
Con las tres primeras opciones prácticamente descartadas, el mercado sigue con su cuenta atrás hasta las 23:59 del 31 de enero.
