Noche mágica la registrada en el Campo de Mestalla. El combinado de Mestalla, logró una victoria que le colocará en la fase de grupos merced a una buena segunda parte en la que los goles de Pablo Hernández y Villa daban la victoria a los locales. El combinado valencianista se presentaba con rotaciones propias del exceso de partidos y con la competición liguera que no perdona.
Daniel Ortega | NOSTRESPORT.COM
Noche mágica la registrada en el Campo de Mestalla. En la que el combinado valencianista se presentaba con rotaciones propias del exceso de partidos y con la competición liguera que no perdona con su partido de este fin de semana que se disputará en tierras vallisoletanas frente al Real Valladolid.
El Valencia abría un encuentro en el que se presentaba como máximo candidato a entrar en la fase de grupos dada la superioridad frente al combinado de Madeira. No obstante el equipo visitante capitaneado sobre el césped por Bruno y entrenado por Lori Sandri, daba buena cuenta de que no iba a tomarse su estancia en Valencia como una mera visita turística, si no que iban a poner sobre el campo toda su artillería para intentar darle la vuelta a la eliminatoria que se iniciaba en el viejo santuario valenciano con un tanto a favor de los de Emery.
El cuadro portugués que encaraba en varias ocasiones la meta defendida por Guaita no conseguía que sus jugadas se definieran con acierto para sus intereses. Mientras tanto el combinado local buscaba desde el inicio penetrar principalmente por bandas, gracias a la cual llegaría la primera oportunidad en pies de un renovado Vicente pero su disparo se pierde por escasos centímetros de la portería defendida por Marcos. Los locales buscaban sin fortuna ampliar su resultado en el coeficiente de la eliminatoria final jaleados por su público que animaban sin cesar desde una hora antes del encuentro, pese a que el viejo coliseo valencianista no registró una entrada propia de una gran noche europea. El acierto tampoco se aliaba con los de Mestalla aunque demostraban llevar el ritmo del partido superando en todos los aspectos a un Marítimo que buscaba desestabilizar el marcador en los primeros instantes del envite, principalmente en las botas de Bruno y Djalma.
En un momento del encuentro en el que las imprecisiones por ambos combinados eran evidentes llegaría la jugada en la que Albiol se quejaba del abductor y no tardaría en ser substituido por David Albelda cuando el reloj tan solo marcaba 25 minutos de juego de la primera parte.
Imprecisiones continuas
Las imprecisiones seguían en un combinado valencianista, que aun teniendo el partido controlado no mostraba ese juego de líder al que últimamente nos tiene acostumbrados. Por su parte el Marítimo que no se caracteriza por su potencial precisamente pero si por su constancia, seguía buscando la meta valenciana sin amilanarse por estar en el campo del actual campeón de liga de la primera división e€spañola. Djalma en primera instancia y Bruno minutos más saludarían con el esférico la cruceta de la portería defendida por el espigado Guaita sin otras consecuencias que el típico “uuuyy” en la gradería del coliseo blanquinegro.
Fernandes que la primera parte seria uno de los hombres más importantes del cuadro valenciano reivindicando un puesto en el once inicial dejaba un balón para Vicente que chutaba pero Marcos blocaba sin muchas consecuencias.
Llegando al final del primer periodo el Marítimo continuaba con su trabajo constante en busca de una recompensa que podría haber llegado con el lanzamiento de Manú que encontró de nuevo a Guita. Pero sin duda esta jugada sería el preludio del jarro de agua fría para el combinado blanquinegro cuando en la siguiente jugada llegaría la recompensa buscada por los portugueses con el gol de Marcinho. Un disparo conseguido tras quedarse solo ante un error defensivo y que desestabilizaba el marcador.
Con esto y poco más el colegiado de la contienda mostraba el camino de los vestuarios para ambos equipos. Momento que debería ser aprovechado por Unai para buscar la mejor manera de aclarar una situación que se ponía complicada con el empate en la eliminatoria.
El Valencia se colocaba el mono de faena
En el segundo tiempo el Valencia se posicionaba sobre el césped pero sin cambios exceptuando el ya conocido de Albelda por el lesionado Albiol. Desde los primeros segundos el equipo de Emery daba la sensación de buscar ser el Valencia grande. A los dos minutos de la vuelta al terreno de juego tras el descanso Asier Del Horno deja el balón para Vicente que busca la cabeza de Angulo que finalmente no logra rematar el esférico sobre la meta portuguesa.
Principalmente de las botas del jugador vasco salía la organización de las jugadas que se convertiría finalmente en uno de los mejores hombres en la segunda parte. El juego del Valencia seguía dando buenos frutos con jugadas que levantaban al respetable de sus asientos. De nuevo Asier, buscaba en esta ocasión a Maduro que puso un centro templado buscando encontrar a Vicente y Angulo pero el balón se pierde en la lejanía sin problemas para la meta portuguesa.
Pese a la mejoría de su juego y ante la inexistencia del combinado rival los locales no lograban perforar la meta portuguesa. Ante esta situación Emery hacia uso de una de sus armas más preciadas, David Villa. El “guaje” entraba sustituyendo a Iván Helguera y el Coliseo aplaudía la entrada del asturiano.
El Valencia era dueño y señor del esférico y tan solo Marcinho en alguna ocasión hacia ver que el Marítimo se encontraba sobre el campo de Mestalla, pero el resultado seguía siendo adverso para los intereses locales. Los de Emery buscaban sin descanso la meta portuguesa y aunque pasaban los minutos los de Emery no se ponían excesivamente nerviosos. Con las cosas claras el técnico vasco daba entrada a Juan Mata y retirando a un extasiado Vicente que viene demostrando que en breve volverá a ser de nuevo “El puñal de Benicalap”
De nuevo Del Horno buscaba la internada de Vicente que dejaba un balón a Pablo Hernández, pero su balón rozaba la cruceta. Fruto de las buenas oportunidades llegaría la alegría al graderío de Mestalla cuando Asier Del Horno dejaba un balón milimetrado a la cabeza de Pablo Hernández que en esta ocasión no fallaba y colocaba el empate en el marcador y ponía al Valencia mucho más cerca de la fase de grupos. El buen juego seguía divirtiendo al respetable que ya más tranquilo llevaba en volandas a su equipo.
Del Horno lo intentaría sin descanso una vez más dejando el balón a Fernandes que no pudo rematar una nueva oportunidad del combinado de Emery. Y cuando ya el árbitro miraba su reloj para finalizar el encuentro de vuelta de la primera ronda tuvo un momento para ver que Villa se internaba en el área y caía y el árbitro de la contienda no dudaba en marcar el punto fatídico ante la incredulidad de los integrantes del equipo portugués. Y como no… el Asturiano no falló y marco un nuevo gol que otorga una victoria europea al Valencia en un partido con dos fases muy marcadas, con eso estaría muy bien saber que puede llegar a decir Unay en el vestuario… pero eso esta claro que siempre quedara de puertas para dentro, eso sí… mientras que siga ofreciendo espectáculo, tampoco es importante saber ese dato.
Los datos del partido:
Valencia CF 2: Guaita, Maduro, Albiol (Albelda, min. 25), Marchena, Angulo, Del Horno, Vicente (Mata, min.70) Helguera (Villa, min. 58), Fernandes, Pablo Hernández y Hugo Viana.
CS Marítimo 1: Marcos, Cardozo, Miguelito, Paulo Jorge, Bruno, Olberdam, Manú (Bruno Fogaça, min. 85), Djalma (Moutinho, min. 79),Luis Olim, Marcinho (Gonçalo Abreu, min. 68) y Joao Guilherme.
Goles: 0-1 Marcinho (min. 40), 1-1 Del Horno (min. 78), 2-1 Villa (min. 94)
Árbitro: Iván Bebek (Croacia) amonestó a Helguera, Albelda, Hugo Viana y Villa del Valencia CF. Del Marítimo vieron cartulina Bruno, Guilherme y Fogaça.
Incidencias: Partido de vuelta de la primera ronda de la UEFA Cup. Camp de Mestalla, 25.000 espectadores.
