A nivel futbolístico el Málaga enseñó el camino al Levante Unión Deportiva (26 de septiembre), en su empate sin goles conseguido en el Bernabéu, para intentar arañar algún punto en el Santiago Bernabéu.
Aunque el Real Madrid tuvo infinidad de ocasiones y llegadas al área, en su mayoría marradas por Cristiano Ronaldo, el cuadro malacitano se cerró muy bien por el centro evitando la circulación del equipo merengue en los tres cuartos, ahogando a Isco y Modric, por lo que siempre se estrellaban por el medio de la muralla malagueña. Sólo Marcelo abría vías de agua.
Aunque Rafa Benítez destacó el gran número de oportunidades y llegadas al área, lo cierto es que por momentos se atascó el juego blanco y cundió el nerviosismo. Fue la tarde sabatina en la que se había lesionado Messi, por lo que el ambiente fue propicio y esto empeoró la lectura blanca del resultado.
De local, salvo el 5-0 del equipo merengue sobre el Real Betis, su trilogía contra los andaluces en el Coliseo Blanco no ha sido muy positiva. 1-0 contra el Granada, con mal juego y muchas ocasiones nazaríes, y el referido empate contra los de la Costa del Sol.
La defensa poblada granota puede impedir que el Real Madrid encuentre espacios. Pero hay que presionar el pase inicial en medio campo primero.
Benzema es el jugador que mueve a los defensas para que Cristiano Ronaldo encuentre la vía del gol.
El francés cae a banda para abrir terrenos a los llegadores, pero siempre con la idea en mente que finalice el luso la acción.
Isco y Modric son los pasadores más peligrosos, porque Kroos se queda atrás mandando, pero interviniendo menos en ataque de lo que debería.