Peñíscola saca un punto en una pista muy complicada y acumula 3 jornadas consecutivas sumando que aleja del descenso y aumenta la moral de un grupo que día a día está creciendo tras el titubeante inicio de temporada, tras la victoria clave en Gran Canaria y el punto el pasado sábado en casa, ahora suma otro importante punto en un partido de los que hacen afición.
La primera parte se caracterizó por las ganas de inicio de los baleares para ganar muchas jornadas después, aguantó Peñíscola que propuso una defensa en media pista agresiva que solo dejaba a los locales efectuar disparos desde media distancia, ahí destacó Molina que recibía tiros desde cualquier zona y perfil sacando un arsenal de paradas dignas de un portero que debería recibir de nuevo la llamada de la selección, se adelantaban los locales al filo de los 10 minutos de juego cuando Eloy Rojas disparó desde 12 metros y que Molina tapado no pudo atajar, seria la única que el muro de Peñíscola no atajaría, se vino arriba el conjunto de Cani intentando tener el balón y circular para provocar los fallos defensivos de Palma, Juan Emilio fue quien en una media vuelta de libro conseguía empatar el encuentro con un punteron raso que se coló en la portería de Carlos Barron.
Tras el descanso se paso a un partido de golpe por golpe, primero golpeaba Palma, respondía inmediatamente Peñíscola, después daba Peñíscola y respondían los baleares, así se paso gran parte de la segunda mitad. Mediado el minuto 30, los azules empezaron a mover el balón y a jugar con la ansiedad de Palma, llegaban las ocasiones y se sentía cómodo el equipo, lo que provocó el tiempo muerto de Palma. Míchel a falta de 2 minutos robó un balón y lo estrelló en el palo cuando Son Moix ya se había sentado creyendo que era el 1–2. En los últimos segundos lo intento el conjunto de Vadillo, pero la defensa azul se hizo fuerte para sumar por tercera jornada consecutiva y alejar fantasmas.