Andy Murray ha superado a David Ferrer en las semifinales del Open de Australia. El tenista británico reivindicó su juego tras caer en el primer set, fue ampliamente superior en la serie de los tie breaks y contundente en el tercero donde aplastó al alicantino. Ferrer firma su mejor actuación histórica en el primer Grand Slam del año.
- Roger Ferrer
- Remontada y a cuartos de final
- Ferrer debuta con victoria
Matías L. Sartori | NOSTRESPORT.COM
No pudo ser. David Ferrer despertó del sueño radicado en Melbourne, concretamente, en el primer Grand Slam del 2011. Andy Murray fue el encargado de frenar a la locomotora de tenis alicantino que seguía en auge tras conquistar el torneo de Auckland la pasada semana y firmar una actuación maravillosa e histórica en el Abierto de Australia eliminando al mejor tenista del mundo, su compañero y amigo Rafa Nadal.
Ferrer comenzaba las semifinales con el pie derecho atribuyéndose la primera manga con un 6-4 que ponía en jaque al escocés. El alicantino pisó la pista de Melbourne con una concentración que matriculó en un primer set disputado pero no imposible para la mejor representación valenciana.
El segundo set pudo haber ampliado diferencia cuando el marcador indicaba 5-4 a favor de Ferrer. Pero un despiste en el juego y una gran reacción a puro ímpetu de Murray forzaron la historia a un tie break donde el tenista británico fue letal. Murray vapuleó la instancia fatídica con soberbio saque que le permitió presumir de hasta cinco set point.
La tercera manga presenciaría un iluminadísimo Andy Murray que atropelló a Ferrer con un arrogante desempeño que parecía pulverizar las esperanzas del tenista de Jávea tras un 6-1 que inclinaba el encuentro a favor del británico.
Sin embargo, Ferrer iba a percibir algunas molestias en su rival que lo entusiasmarían en un cuarto set de puro espectáculo tenístico. David se convirtió en Goliat para responder el vanidoso juego de Murray que parecía que la jornada estaba decidida. Ferrer mostró síntomas del formidable presente y apeló a su garra y su fuerza para darle pelea hasta el final ante la plenitud de un Melbourne Park que parecía estar a favor con el tenista valenciano. Pero el tie break volvería a cruzarse en su camino y el desenlace de la historia volvió a favorecer al escocés que con confianza, estilo y concentración finiquitó las semifinales para conseguir el pasaporte a la final por segundo año consecutivo.
Así, Ferrer se queda en las puertas de la final del Open de Australia registrando su mejor desempeño histórico en el primer Grand Slam de la temporada.
Foto: RFET / Australian Open
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