El Levante UD comunicaba a través de sus canales oficiales, sobre la una de la tarde del pasado jueves 22 de octubre, que tras los test rutinarios previos a cada partido, se habían hallado tres positivos por COVID-19 en la plantilla de su división de fútbol sala.
Instantáneamente, se procedió a activar el protocolo anti-COVID, quedando los afectados aislados en sus casas bajo la supervisión de los médicos del club. Asimismo, el resto de la plantilla, cuerpo técnico y empleados fueron sometidos a pruebas de antígenos, dando todos ellos resultados negativos. Aunque para confirmarlo de una forma más segura, además, han realizado pruebas PCR que descarten definitivamente más positivos.
Horas más tarde, el Juez Único de Competición tomaba la decisión de aplazar el partido correspondiente a la sexta jornada de la Primera División de la LNFS, que debería haber enfrentado al Levante UD FS y al Jaén Paraiso Interior este viernes 23 de octubre, por los tres positivos en la plantilla granota.