Víctor Camarasa ha sido convocado, por primera vez, con la Selección Española Sub-21para el partido internacional que disputarán las selecciones de España y Bélgica el próximo miércoles 12 de noviembre a las 20:30 h en el Estadio Municipal A Malata, de Ferrol.
El levantinista está citado el lunes 10 de noviembre a las 9:30 h en el aeropuerto de Madrid, desde donde se desplazarán a 11:35 h a La Coruña, para continuar el viaje en carretera hasta Ferrol. El regreso de Camarasa está previsto el jueves 13 de noviembre por la mañana.
«No me lo esperaba»
Víctor Camarasa concluyó al filo del mediodía el entrenamiento con el Levante, pautado en las instalaciones del Ciutat de València, ajeno a la noticia que se estaba conciendo en esa misma franja horaria en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas en Madrid. Mientras el centrocampista granota se acicalaba en el interior del vestuario y afrontaba un acto tan mundano como cortarse el pelo, Albert Celades incluía su nombre en el registro de la convocatoria de la Selección Española Sub’21 que afrontará un duelo ante Bélgica el próximo miércoles en el Estadio de A Malata en El Ferrol. “Es el día más importante de mi vida”, advirtió, con una sensación que orillaba entre la agitación y el nerviosismo, Victor Camarasa al filo de las dos sentado en la sala de prensa del feudo del barrio de Orriols.
El mediocentro recibió una llamada de un amigo personal que le confirmó su inclusión en la rojita. Se trata de su estreno con la casaca del combinado español. “No me lo esperaba”, manifestó con sinceridad. La llamada de la Selección turbó de inmediato su pensamiento. Hay ciertas imágenes que comenzaron a fluir por su mente adquiriendo una velocidad de vértigo. Su todavía corto pasado como futbolista regresó para materializarse ante sí de repente. “Me han venido muchísimos recuerdos, de cuando se entrenaba con frío y calor, también he tenido momentos duros y la verdad es que no puedo ni hablar”.
Evidentemente su familia ocupa un espacio importante en esa memoria. De ahí que su primera e instintiva reacción fuera pornerse en contacto con sus padres. “Enseguida he llamado a mi padre y a mi madre, que casi se pone a llorar, y mi padre estaba muy emocionado, quiero vivirlo con ellos”. Camasara compartió el entusiasmo y la satisfacción generada por su llegada a la Selección con todos aquellos que le han impulsado a lo largo de su trayectoria. “Esto es un conjunto de todo, del Levante que apostó por mí, del técnico que me puso y de todo”, relató impresionado por todo lo acontecido en una breve secuencia temporal. Camarasa estrenó su condición de jugador vinculado a la primera plantilla del Levante el curso pasado bajo la egida de Caparrós.
Su tránsito desde el Juvenil División de Honor al umbral de la máxima categoría fue realmente veloz. El mediocentro incluso festejó un gol en el formato de la Copa del Rey, con motivo de la eliminatoria de dieciseisavos de Final que reunió al Levante y al Recreativo de Huelva. No obstante, el futbolista adquirió mayor trascendencia en el ejercicio que se está disputando en tiempo presente. Desde el período estival era posible adivinar que su rol podía variar sustancialmente. La apuesta de Mendilibar por el canterano fue indudable y quedó refrendada en el arranque de la competición liguera. Camarasa se convirtió en una pieza indiscutible en el engranaje de la medular granota con el preparador vasco. Sus números lo atestiguan. Contabiliza seiscientos sesenta y cinco minutos, que se reparten entre las ocho confrontaciones en las que participado, que lustra con el gol obtenido en Eibar.