El Valencia sigue hundiéndose en la clasificación gracias a otra segunda parte lamentable y a la actuación vergonzosa del árbitro que señaló tres fueras de juego inexistentes y un penalti muy dudoso.
Si algo puede salir mal saldrá peor, esa es la máxima de la Ley de Murphy y parece que Murphy debía de ser del Valencia en algún momento de su vida. El partido empezó que ni pintado, error garrafal de Javi Varas y regalito a Rodrigo que marcó a placer en el minuto dos. El Valencia aprovechó el momento de zozobra de Las Palmas para intentar marcar el segundo tanto que le diera esa tranquilidad que nunca tuvo a lo largo del partido. Alcácer pudo marcar ese segundo tanto pero Pérez Montero invalidó la posición del nueve de forma erronea en dos ocasiones, la más clara una que encaraba sólo al meta canario. Como ya pasara ante el Celta, otro fuera de juego que no era perjudicó al Valencia y ya van demasiadas ocasiones a lo largo de la temporada que estas circunstancias se vienen dando. Con el paso de los minutos el Valencia se fue difuminando, muchos jugadores fueron perdiendo protagonismo y Las Palmas empezó a achuchar a los valencianistas y si no fuera por una gran intervención de Alves el marcador hubiera sido diferente al descanso.
El paso por los vestuarios no le sentó nada bien a los valencianistas, los locales salieron a por todas y empezaron a disfrutar de ocasiones hasta que llegó el empate en un dudoso penalti que transformó Jonathan Viera con mucho suspense ya que Alves casi logró atajar la pena máxima. El árbitro ante la duda siempre pitaba en contra del Valencia, y el penalti fue un gran ejemplo de ello ya que existe contacto pero no lo suficiente como para tomar esa drástica decisión. Con el gol local los visitantes se hundieron como viene siendo habitual a lo largo de la temporada y la timida reacción fue un disparo lejano de Piatti que desvió a córner Varas. Los canarios acumularon ocasiones e hicieron trabajar a Alves, sobre todo en una doble intervención a bocajarro. Para colmo, a falta de veinte minutos, un centro sin mucho peligro acabó en un despeje de Santos que rebotó en Mustafi y se coló en la portería de Alves, un despropósito, ni las carambolas favorecían a los valencianistas. Las Palmas pudo sentenciar, tuvo más y más claras pero Alves sostuvo al Valencia, Alcácer tuvo una clara de esas que no suele fallar pero ni eso estaba a favor de los ché. Para colmo, y como guinda final, el asistente de Pérez Montero anuló un gol legal al Valencia por otro supuesto fuera de juego que tampoco era.
El panorama que se le presenta al Valencia es muy turbio y más teniendo en cuenta el calendario tan duro al que deben enfrentarse los de Ayestarán, con visita incluída al Camp Nou y al Bernabéu. Las sensaciones son cada vez más negativas y la única esperanza es que hayan tres equipos peores que el Valencia en lo que resta de temporada, algo que por el momento se cumple ya que equipos como Getafe, Granada, Levante o Sporting están inmersos en una espiral muy negativa. Mestalla puede ser clave para que el equipo logre la salvación y el partido contra el Sevilla se antoja como una auténtica final teniendo en cuenta el rival que viene y teniendo en cuenta que los de Emery no han logrado una sola victoria en toda la temporada como visitante.
Fecha técnica
UD Las Palmas 2: Javi Varas; David García, Lemos, Aythami, Dani Castellano; Viera (Araujo, min. 74), Tana, Roque Mesa, Momo (Montoro, min. 83); El Zhar (Vicente Gómez, min. 69) y William José.
Valencia CF 1: Diego Alves; Barragán, Mustafi, Santos, Siqueira; Javi Fuego; Rodrigo, Danilo (Feghouli, min. 61), Parejo, Piatti (André Gomes, min. 67) y Alcácer (Negredo, min. 80).
Goles: 0-1 Min. 2 Rodrigo 1-1 Min. 49 Viera 2-1 Min. 63 Mustafi (p.p.)
Árbitro: Pérez Montero (C. andaluz). Amonestó a Willian José y Roque Mesa, por la UD Las Palmas, y Piatti, Barragán, Javi Fuego y Mustafi, por el Valencia CF.
Incidencias: 31ª jornada de Liga en Primera División. Estadio de Gran Canaria (20.000 espectadores).