Costó anotar en un primer cuarto a pocos puntos en el que Astou Ndour se echó el equipo a la espalda tanto en ataque como en defensa. Con un buen marcaje sobre Maria Vadeeva, Ndour logró anular a la jugadora de referencia de Rusia y con ocho puntos casi seguidos, lideró la ofensiva en los primeros compases del encuentro (13-12). Fue la salida de Leo Rodríguez y de Maite Cazorla lo que dio un soplo de aire fresco al ataque de la Selección (17-12).
La buena tendencia prosiguió al comienzo de un segundo cuarto en el que España llegó a marcharse nueve puntos por delante (21-12). A partir de ahí, el choque entró en un tira y afloja en el que el combinado nacional logró frenar los arreones de una Rusia liderada por Raisa Musina.
Tras el 21-17, apareció una gran Raquel Carrera para poner el 31-21, pero con un 2-9 el rival ajustó para llevar el partido al 33-30 del descanso. Fue buena la salida de España con unas Carrera y Cazorla acertadas (37-30) si bien, Rusia no tardó en acercarse para empatar el choque a 39 transcurridos siete minutos del tercer asalto.
Desde este momento hasta el final del partido, la igualdad se adueñó del partido y fue la mala fortuna de cara al aro lo que impediría a España aprovechar las pequeñas ventajas que iba obteniendo. A falta de un minuto y medio para el final, Rusia sorprendió con un parcial de 0-7 que alejó a España de la tan deseada victoria.
Pese a que la remontada parecía inverosímil con el 64-71 y 40 segundos para el cierre, España peleó hasta el último suspiro del partido. Un 2+1 de Cazorla y un triple de Rodríguez dieron motivos para creer (70-73), pero las rusas fueron capaces de sostener el colchón de puntos al no errar en su paso por la línea de tiros libres (74-78).
No es la despedida deseada para este EuroBasket en el que el equipo ha tenido que hacer frente a más adversidades de las esperadas. La tensión de la semana previa al torneo con las bajas de Alba Torrens y Tamara Abalde, el tropiezo ante Bielorrusia y la dura derrota frente a Serbia han marcado los pasos de una Selección que siempre estuvo cerca de la victoria y que se ha quedado fuera por pequeños detalles.