Los tres de arriba reclaman su sitio tras sumar 9 goles de los 12 que lleva el conjunto de Marcelino en las primeras 6 jornadas ligueras
Cómo ha cambiado la papeleta este año. El Valencia es un equipo. Por fin se puede decir y con mucho margen de mejora. Atajar la sangría de goles era vital para el resurgir valencianista. Después de centrar toda la pretemporada en solucionar este grave problema, el siguiente era arreglar el desencanto con el gol. Ni Santi Mina, ni Zaza ni Rodrigo -el mejor delantero del equipo según Marcelino- terminaban de convencer al propio técnico, Mateu Alemany y a la afición.
Rodrigo Moreno va a cumplir su cuarta temporada visitendo la camiseta del Valencia, y entre lesiones y falta de puntería su calidad no es suficiente para que la parroquia valencianista siga creyendo en él. Santi Mina no convence por su irregularidad sobre el césped. El atacante no ha encadenado partidos a buen rendimiento. Y Simone Zaza, el gran fichaje de invierno de la temporada pasada, aporta trabajo, garra y carácter, pero le falta gol. En cuestión de 3 partidos, estos han dado un golpe muy fuerte encima de la mesa.
Ocho de los nueve últimos goles son de su autoría. Es más, de los doce tantos que lleva hasta ahora el Valencia, nueve han llevado la firma del italiano (5), del hispano-brasileño (3) y del gallego (1). ¿Que ha pasado para cambio tan radical? Gran parte de la culpa la tiene Marcelino, como no podía ser de otra manera. Pero la llegada de Gonçalo Guedes y Andreas Pereira han sido claves para poner en marcha la maquinaria del gol.
Al cierre de mercado, una de las prioridades era reforzar la posición de ‘9’. No vino ninguno. En su lugar, dos jugadores de creación, de magia, verticales y capaces de defender. Ahí está el kit de la cuestión, la chispa que ha encendido la ilusión del valencianismo en apenas tres encuentros. ¿De verdad hacía un delantero o jugadores con unas características muy determinadas?
En dos partidos, Gonçalo Guedes se ha ido destapando y dejando retales de la calidad que atesora. Con espacios está al nivel de los mejores de la competición. En cuatro ratos, se ha convertido en el segundo asistente del equipo (3) tras Carlos Soler y después de la exhibición contra la Real Sociedad. Desborde, velocidad, regate y visión de pase. El portugués es el más desequilibrante de los dos, con espacios te castiga mucho, pero Pereira es más obstinado en el trabajo defensivo en la medular. Dos joyas, dos diamantes en bruto que han venido para levantar a este Valencia que ya está haciendo su camino para volver a su destino natural: Europa.