El Villarreal recibe al conjunto azulón (domingo 12:00) si apenas tiempo para digerir la eliminación de Europa League y en plena crisis de resultados.
No hay tiempo para pensar en que pudo haberse hecho de forma distinta, porque la competición no para para el submarino. Tras el varapalo de la eliminatoria ante el Lyon, el Getafe visita el Estadio de la Cerámica en el primer de tres partidos de liga en una semana.
En el peor momento de la temporada para Calleja, el conjunto azulón buscará pescar en río revuelto como ya hizo en Septiembre, cuando los de Bordalás endosaron un 4-0 en el Coliseum Alfonso Pérez para dar la estocada final a Fran Escribá, quién tras ese resultado fue destituido del banquillo groguet. En situación muy distinta se encuentra el entrenador madrileño, ya que a pesar de que las sensaciones de los últimos partidos no han sido buenas, los futbolistas, la afición y la directiva confían plenamente en él.
Aún así, el panorama no es halagüeño en absoluto, ya que si bien el equipo está pecando de falta de gol y decisiones en los últimos metros del campo, esto no va a mejoar ante un Getafe que juega descaradamente a la contra, con una solidez defensiva envidiable y dos veteranos, pero viviendo una segunda juventud, como Jorge Molina y Ángel Rodríguez.
Javier Calleja, en cambio se muestra confiado en revertir la situación y espera que este partido sea el punto de inflexión que el equipo necesita. Para el encuentro no podrá contar con los lesionados Bruno, Andrés y Sansone, además del sancionado Álvaro González y los descartes por decisión técnica de Salem y Marín. Teniendo en cuenta la carga de minutos de jugadores importantes, se esperan rotaciones y la entrada al 11 de gente como Rukavina, Soriano o Raba.