jueves, diciembre 5, 2024

Sueños helados

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La ventaja del balonmano es que ha llegado asociado con otros temas igualmente sugerentes y no sólo de manera directa. Su impacto llegó por el corazón más que por los éxitos puntuales.

Y en el caso que nos ocupa, la visita a colegios y la entrada en las casas a través de la TV han sido dos elementos vitales para la difusión de un deporte desde los 80, en el que España (Los Hispanos) ha ganado dos mundiales en 2005 y 2013 y tres bronces olímpicos (1996/2000/2008).

Los sábados por la tarde, en esas retransmisiones en TVE 2 eran un clásico, con el Atlético de Madrid, el Barça, el Teka, Elgorriaga Bidasoa, el ‘Cajamadrid’, Granollers… esos pabellones como La Albericia, Artaleku y jugadores míticos: Juan Alemany, Lorenzo Rico, Cecilio Alonso, Reino…

Además el contacto de muchos aficionados al mundo del balonmano en la zona de Valencia se puede resumir con el estilo brillante conque se jugaba en la Capital del Turia, y aunque parezca extraño, también el que se evoca a través de un helado y de la localidad de Alzira. Y es que la marca Avidesa de Luis Suñer, con sus característicos camiones de reparto en los años 80, eran un preludio de lo que vino a continuación en los 90. Algunos recuerdos y evocaciones no respetan el margen temporal y se solapan en el tiempo, adelantándose y anticipando el futuro.

Alzira evoca 5 nombres en este tema: Alemany, Jaume Fort, Aleix Franch y los rumanos Stinga y Voinea, dos adelantados a su tiempo y mitos absolutos. La impresión que causaba ver en directo el giro de la muñeca que realizaban en un 7 metros, el posterior bote de la bola y el cambio de trayectoria del esférico es lo más cercano a la magia que se ha podido ver in situ.

Preludio, gloria y recuerdos

La final de la Copa EHF 1993-94 contra los austriacos del Linz tiene el aroma de esas finales de la Recopa en fútbol, que sabías que no se conseguía así ser el Campeón de Europa, pero se era rey por un día. Una doble confrontación contra los centroeuropeos después de haber sido referentes en la Comunitat durante años. Dos partidos para la historia de este deporte, con mucha carga de profundidad. Y es que el significante era menos importante que el significado. Las formas y el fondo.

Y siempre el verano está presente con este deporte, por lo menos a título personal, y lo evidencia el balonmano playa en la actualidad. El pabellón del Ovni está en la ruta clásica para acceder a las playas de la zona de Canet y Sagunto, y los recuerdos se asocian a verano, playa y balonmano. En el colegio siempre se jugaba a balonmano por encima de otros deportes además.

En estos tiempos en los que la Liga la gana el Barcelona bastante fácil porque tiene un superequipo, pléyade absoluta de estrellas mundiales, y el Fertiberia Puerto Sagunto y sobre todo el Benidorm están haciendo un temporadón en la LIGA ASOBAL BAUHAUS, es bonito evocar el gran pasado del deporte en cuanto al balonmano se refiere en la Comunitat Valenciana. Y está claro que hubo otros equipos como el Caixa Valencia: En 1989 el Caixa Valencia se trasladó a Alzira y consiguió la Copa en 1992. El club se disolvió en julio de 1995. A los aficionados nos dejó helados.

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