El Valencia ha caído derrotado en Mestalla frente al Sevilla por 0 goles a 2 (Badé, Suso) en un partido marcado por la decisión de Del Cerro Grande de no señalar penalti en unas manos claras de Ferrnando.
Nueva final para el Valencia. Sevilla, el rival, Mestalla, el lugar. Y la afición lo sabía y, como es costumbre a pesar de la situación que vive el equipo y el club, tanto el recibimiento como la entrada fueron impecables.
Se preveían cambios en sistema y alineación tras la derrota en Almería, y así fue. Doble lateral por la izquierda con Gayà jugando por delante de Lato, Cavani en punta y, por detrás suya, Samu Castillejo con total libertad de movimiento.
Con todos estos cambios, y apoyados por una afición entregada desde el pitido inicial, el Valencia fue protagonista durante el primer tramos del partido, generando situaciones de peligro, pero sin acabar de encontrar el disparo.
Castillejo con un disparo rebotado, un centro envenenado de Foulquier y disparos lejanos fueron los primeros acercamientos del conjunto che, que volvió a sentir la falta de contundencia en las áreas.
Y es que con muy poco, el Sevilla, tras una serie de rechaces dentro del área obligó a Mamardashvili a estirarse como sabe para sacar una rodilla salvadora y así mantener el 0-0 en el marcador.
Un resultado con el que llegaríamos al descanso del partido. Con el respeto entre los equipos y la falta de acierto en la toma de decisiones en metros finales como protagonistas, se nos presentaban 45 minutos en los que el Valencia estaba obligado a sacar algo positivo.
Con esta idea en mente, el Valencia volvió a ser protagonista durante el tramo inicial de la segunda parte y Yunus Musah tuvo en sus botas el gol tras una buena contra. Pero, como viene siendo una constante en la temporada, el que perdona lo paga.
De nuevo a balón parado, la defensa del Valencia no conseguía despejar, fruto de un codazo que Del Cerro no vio, y Badé adelantaba al Sevilla en el minuto 55. La reacción del Valencia llegaría de forma temprana, lo que daría a la acción más polémica, quizás, de lo que llevamos de temporada en Mestalla.
Centro por la izquierda, control de Samu Castillejo y Fernando rechaza el balón de forma clara con la mano. Del Cerro Grande no vio nada, pero desde el VAR fue avisado. En la revisión, con ya Cavani sosteniendo el balón para lanzar y con toda la grada llevándose las manos a la cabeza por la indecisión del colegiado, Del Cerro se reafirmaba de su primera decisión y hacía enfurecer a toda la afición local.
Con el Valencia aun pensando en esa acción, llegaría el segundo del Sevilla con un zurdazo de Suso inapelable para Mamardashvili y que, viendo la diferencia de acierto de ambos conjuntos, el nerviosismo che y la actuación del árbitro, era prácticamente la sentencia del partido a falta de 15 minutos para el final del partido.
Tras esto el segundo gol, Del Cerro no quiso acabar con su espectáculo, se inventó un penalti sobre Marcos André que el VAR le corrigió y decidió expulsar con roja directa a Ilaix por una dura entrada sobre Bryan Gil en el centro del campo.
Con el debut de Javi Guerra como única cosa a destacar del tramo final, se firmaba una nueva derrota del Valencia que se aleja más de la salvación y que va a necesitar una realidad muy distinta a la que hay actualmente para no estar el año que viene en La Liga Smartbank.
