Valencia y Villarreal se enfrentan el próximo domingo en un partido que estará marcado por el buen momento que ambos atraviesan y la rivalidad existente, sobre todo, desde la eliminatoria de la Copa de la UEFA en 2004.
Los dos equipos se encuentran en la parte alta de la clasificación y arrastran una trayectoria muy positiva. El Valencia, por una parte, ha comenzado la liga muy enchufado y se encuentra a dos puntos del líder; Mientras que el Villarreal, por otra parte, está en octava posición con 14 puntos, pero habiéndose enfrentado ya a duros huesos como Real Madrid, Barcelona o Sevilla.
El domingo, en el Madrigal, se vivirá un derbi que enfrentará a dos aficiones que hace un tiempo presumían de ‘Germanor’ pero que, de un tiempo a esta parte, han acabado con una rivalidad que nació hace no mucho tiempo, concretamente el Jueves 6 de Mayo de 2004.
Rivalidad reciente
No siempre ha existido la rivalidad que se vive hoy en día entre amarillos y blanquinegros, de hecho, cuando el Submarino alcanzó la máxima categoría, varios eran los jugadores del Valencia que jugaron en calidad de cedido en el Submarino, como es el caso de David Albelda o Andrés Palop. Por aquella época ambas entidades mantenían una cordial relación en lo que a traspasos de jugadores se refiere. Por ejemplo Miguel Ángel Angulo o el defensa Quique Medina también habían vestido la elástica del Villarreal. Pero, con el paso de los años, el club castellonense creció deportivamente, hasta alcanzar la semifinal de la Copa de la UEFA.
La rivalidad entre ambos se remonta a esta precisa eliminatoria que disputaron en la Copa de la UEFA de 2004 cuando, tras años de buenas relaciones, se acabó rompiendo una amistad añeja.
En la ida empataron en el Madrigal a cero goles y, en la vuelta, el Valencia se impuso por un gol de penalti transformado por Miguel Ángel Ferrer Mista. Este gol supuso una ruptura de relaciones que se vería reflejada en los despachos.
El Valencia acabó la temporada ganando la UEFA logrando así el doblete histórico, pero también acabó con las aspiraciones del club vecino, que no olvidó.
Ningún traspaso en los siguientes años, ni uno compraba ni el otro vendía.
Últimos movimientos
Años más tarde, la situación se calmó y comenzaron de nuevo a producirse transacciones, como por ejemplo el fichaje de Carlos Marchena tras el Mundial de Sudáfrica. Aunque también se vivieron episodios tensos, como el extraño caso de Fabián Ayala, que no llegó a disputar ni un sólo minuto con el conjunto amarillo, o el fichaje de Gio, pretendido también por el club valencianista. Además, el Valencia tocó a la puerta del Villarreal para preguntar por Bruno Soriano en varias ocasiones, aunque sin encontrar respuesta.
El último movimiento entre ambos ha sido este último verano con la cesión de Víctor Ruiz (no puede jugar por cláusula), que se intuye como una puerta abierta para retomar esos años de cordialidad.
Ahora toca comprobar como actuarán ambas aficiones y ver si, 10 años después de aquella eliminatoria, se vuelve a aplicar el término ‘Germanor’ para hablar de los duelos entre Valencia y Villarreal.
