El futbolista asturiano está en uno de sus mejores momentos de forma desde que llegó a Valencia, y sin duda no podría haberlo hecho sin la ayuda de los suyos. En el partido del Mallorca conocimos que sus padres iban a jubilarse y dejar de trabajar en su bar de Turón, «El Descanso». Y precisamente un descanso es lo que tomarán sus padres después de tanto años de trabajo y podrán estar más cerca de su hijo.
El pasado viernes en los momentos previos al partido ante el Sevilla se pudo ver en las inmediaciones del estadio a sus padres, Miguel y Sonia, visiblemente emocionados por poder ver por primera vez a su hijo en Mestalla. Los micrófonos de Movistar+ pudieron hablar con ellos, entre varias cosas nos desvelaron el plato preferido del «Guajin», que siempre se pedía las «carrilladas ibéricas» o «cabrito» en el bar.
El delantero ché firmo un gran partido, constantemente corriendo por el campo hasta la última jugada y siendo el culpable de muchos acercamientos al área sevillista. Puso la guinda con un pase que fue medio gol para Javi Guerra, y tuvo incluso hasta el segundo tanto en sus botas.
Durante el previo y al final del partido se le pudo ver inquieto buscando a sus padres, y asi poder saludarlos. Pues no fue hasta el final del partido cuando el asturiano pudo saludar a su madre, a la que pilló desprevenida mientras atendía a las cámaras de VCF Media. Ante las cámaras se enfundaron en un fuerte abrazo y despues posaron para hacerse unas fotos junto a su padre.
La madre muy orgullosa de lo que ha conseguido, «Afortunada de ver que mi hijo esté jugando ante miles de personas, que es lo que siempre quiso«, comentaba Sonia. Siempre con el apoyo de su madre ante las decisiones que tomó en el fútbol al marcharse de su pueblo, » Cuando queria marcharse, sabia que es lo que tenía que hacer y lo ha conseguido«, contaba la madre del asturiano.