Cuando se cierra una puerta se abre una ventana. Hace menos de una semana, el Villarreal hacía oficial la rescisión unilateral del contrato de Carlos Bacca y esta misma tarde el submarino amarillo ha hecho oficial la compra de Boulaye Dia, procedente del Stade de Reïms.
El ex del Sevilla abandona la Cerámica dejando un listón difícil de superar para su sucesor: Boulaye Dia. Siguiendo la estela de Cedric Bakambu y Karl Toko Ekambi, el delantero del Reims ha aterrizado esta misma tarde en Villarreal para convertirse en el nuevo delantero de Unai Emery.
Como sus antecesores, Dia es un ariete rápido y físicamente poderoso. El gol ha sido su emblema esta temporada, en la que ha anotado dieciséis tantos, dos en copa y catorce en liga. Un nueve que destaca por su capacidad a la hora de castigar los espacios con desmarques de ruptura a la espalda de las defensas. El delantero senegalés disfruta jugando en equipos que no tienen la posición, que repliegan para contragolpear.
En su primera temporada, Boulaye Dia llegaba al Stade de Reïms para reemplazar a Pablo Chavarria, que acababa de abandonar el club como agente libre rumbo al RCD Mallorca. Este mismo año, junto a Zeneli formó un tándem letal en la Ligue 1. Los siete goles del africano fueron fundamentales a la hora de asegurar la sexta posición que consiguió el humilde Stade de Reïms, que clasificaba así para las rondas previas de la UEFA Europa League.
Pese a ello, la 2020/2021 no ha sido la mejor de las temporadas para el equipo de Reïms. De la sexta han pasado a la decimocuarta posición, además de no haber podido superar la segunda ronda clasificatoria de la UEFA Europa League y haber caído en el primer partido de la Coupe de France. Aun así, esto no ha impedido que Dia cuaje la mejor temporada de su carrera. Con catorce goles en liga se ha colocado como décimo máximo goleador de la máxima competición gala, empatado con Karl Toko Ekambi, ex groguet.
Chavarria ha rescindido su contrato con el Mallorca para firmar por el Málaga. Fotografía; R.C.D. Mallorca
El delantero franco-senegalés ha disputado más de 3.000 minutos, repartidos en 39 partidos, 80′ por encuentro. Solo dos partidos se ha perdido el entonces delantero del Reïms, uno en Liga y otro el Europa. Ha sido titular en todos los restantes, salvo en dos (contra el Paris Saint-Germain y el Valenciennes, en Copa, donde anotó dos goles en 21 minutos).
SU ANTECESOR
El delantero del Stade de Reïms llegaría para ocupar el sitio dejado por la marcha de Carlos Bacca. Tras cuatro años en el Villarreal, Bacca ha abandonado el club de la Plana en una temporada en la que ha ido de menos a más aprovechando el bajón de rendimiento de Paco Alcácer.
Pese a comenzar la temporada como suplente, Bacca ha disputado 1.459 minutos, 42 por partido. Una cifra que habla de un jugador importante, sobre todo en las copas (Copa del Rey y UEFA Europa League), donde ha sido más veces titular. En la Europa League ha disputado 530 minutos (59 por partido), un 36 % del total, y en Copa del Rey 171 minutos (57 por partido), un 12 % del total.
Como el resto de delanteros del Villarreal, Bacca es un jugador que no se relaciona tanto con la posesión de pelota. Siendo suplente, el colombiano toca 13 balones por partido, una media de 29 por cada noventa minutos. De estos trece balones, ocho acostumbran a ser pases, en los que tiene un acierto del 66 %.
Con todo, Bacca ha anotado un total de 9 goles y dado dos asistencias. Buenas cifras para un delantero suplente, pero engordadas por el hat-trick (33 % del total) que conseguía en el final de temporada contra su exequipo, el Sevilla. De los seis goles restantes, uno ha sido en Copa del Rey y otros tres, así como las dos asistencias, en Europa League.
Carlos Bacca pasará a la historia como el delantero titular de la final de Gdansk. Fotografía; Villarreal C.F.
Ahora su futuro parece estar en Granada, con quien podría debutar precisamente, en el primer partido de LaLiga contra el Villarreal.
ENCAJE DE BOULAYE DIA
Ahora su lugar lo ocupará Boulaye Dia, un perfil de delantero que parece gustar mucho en las oficinas del Villarreal.
Al igual que Paco Alcácer y Carlos Bacca, Dia es un jugador que no necesita recibir muchos balones. Solo treinta promedia por partido, 34 por cada noventa minutos. De todos esos toques, solo diecisiete son pases, de los cuales acierta un 80 %.
Un delantero peleón que participa en una media de diez duelos por encuentro, siete por bajo y tres por alto (pese a sus 1’80 metros de altura). Sin embargo, no se puede decir que sea especialmente efectivo en ellos, ya que solo gana el 45 % de los duelos por bajo y el 25 % de los balones aéreos. Ni siquiera un duelo (0’86) gana por alto por encuentro. Una carencia que deberá pulir si el Villarreal, como contra el Arsenal, decide apoyarse en sus puntas para salir contragolpeando desde un repliegue.
A la hora de tomar decisiones, se trata de un jugador igual de propenso al regate que al disparo. A la hora de chutar, su efectividad sigue por debajo del 50 % (44 %), con menos de un disparo a puerta por partido (0’78). Más exitosos son sus regates, donde tiene un éxito de 55 %, con más de uno completado por encuentro.
Finalmente, otra de las ventajas de la llegada de Boulaye Dia está en su polivalencia. El despropósito del Stade de Reïms le ha llevado a jugar solo, acompañado y hasta en banda.
Boulaye Dia puede jugar tanto en punta como en banda tanto en el 1-4-3-3 como en el 1-4-4-2. Fotografía; Ligue 1 en Español (Twitter)
Donde más ha jugado es en un 1-4-3-3, solo acompañado de dos extremos. Ahí ha disputado 1.398 minutos, el 47 % del total. En cambio solo ha anotado cuatro goles en esta situación, un mero 25 %. De hecho, esta cifra se sitúa por debajo de sus goles esperados en más de un tanto. Por el contrario, las cifras dicen que en esta posición Dia juega más para su equipo. Desde ella ha dado 17 pases clave, uno por encuentro (un 59 % del total) y ha dado su única asistencia.
Sus cifras son mejores cuando ha jugado acompañado. En menos minutos (1.302′) ha anotado más goles (10), más de uno por partido. Su efectividad es considerablemente superior cuando otro delantero le limpia el camino, puesto que con ocho goles ligueros ha anotado 1’73 más de los que estadísticamente debería.
Cuando juega al lado de otro ariete suele partir de la banda derecha, aunque luego intercambien sus posiciones. Desde este costado ha anotado nueve goles en 681 minutos, 1’36 más de los esperados. Además, su acierto de cara a puerta se estabiliza en un 50 %. Esto puede ser problemático, en caso de que Emery dé continuidad al 1-4-4-2, pues este costado es el que suele ocupar Gerard Moreno, indiscutible estrella del equipo.