Tarde vibrante en Quatre Carreres. Los de Ricardo Zanero tenían como objetivo lograr el primer triunfo de las temporada tras no ganar en los primeros dos encuentros. Los valencianos transformaron esa pequeña presión que sentían en una motivación extra. En el minuto 8 de partido, los locales anotaron el primer golpe de castigo y colocaron el 3-0. Aunque la alegría duró no más de dos minutos cuando el Gotics realizó un ensayo y puso el 3-5 en el marcador.
A partir de esa tempranera remontada visitante, el Rugby Club Valencia fue un completo vendaval. El resultado cambió de 3-5 a 29-5 en 20 minutos. Los tres ensayos de los hombres de Zanero hundieron al cuadro catalán que sufrieron un durísimo arreon valenciano. Todo esto sin llegar al descanso.
Tras el paso por los vestuarios los de casa se relajaron y decidieron controlar el partido y no tomar riesgos. Esa tranquilidad la aprovechó el Gotics para hacer un ensayo en el minuto 46. Ante la posible reacción visitante, un golpe de castigo por parte del Valencia dejó atrás cualquier sentimiento de remontada y sentenció por completo el partido 32-10. Con el choque ya finiquitado, los de Barcelona consiguieron un ensayo más para maquillar un poco más el marcador (32-15).