El Valencia CF ha comenzado los primeros movimientos para renovar a André Almeida, a pesar de que quedan tres años para que acabe su contrato, que se extiende hasta 2028. La principal intención del club es mejorar su salario, y también ampliar su vínculo con la entidad algún año más. La importancia del portugués en el equipo ha aumentado con la llegada de Carlos Corberán al banquillo, el centrocampista ha pasado de ser un jugador de rotación a un jugador bastante fijo en los onces del técnico.
Los últimos días del pasado mercado de invierno, el Oporto presentó una oferta de 10 millones de euros por el jugador tras la venta de Nico González, exvalencianista, al Manchester City. Sin embargo, la directiva rechazó la propuesta para no debilitar al equipo en plena lucha por la permanencia. Ahora, el club busca asegurar su continuidad con una mejora contractual que lo sitúe en la zona media salarial del vestuario.
La situación de Almeida ha dado un giro en los últimos meses. Con Baraja apenas contaba y su futuro en Mestalla parecía incierto, pero la llegada de Corberán ha cambiado su rol dentro del equipo. El futbolista luso ha arrancado el año con buen pie, después de ser padre hace un mes, ganar protagonismo en el campo y con una posible renovación en el horizonte