El conjunto bético se encuentra en una situación relativamente cómoda de la tabla aunque tratará de sumar los tres puntos ante el Levante para certificar de manera virtual su permanencia en la categoría para la siguiente campaña.
El Betis llega al encuentro como decimocuarto clasificado con 34 puntos, 5 por encima del descenso, empatados con el Valencia. La posición es de comodidad relativa ya que una victoria certifica prácticamente la salvación, pero una derrota el sábado puede complicar las cosas al conjunto de Merino.
Viene encadenando una mala racha de resultados con tres derrotas consecutivas en sus últimos encuentros ante Athletic, Málaga y Atlético, esta última muy dura tras encajar un 5-1 en el Vicente Calderón la pasada jornada.
En la ida frente al Levante, los verdiblancos se llevaron el gato al agua. Los tres puntos volaron del Ciutat gracias a un solitario gol de Rubén Castro al que los granota no supieron reaccionar.
El conjunto andaluz es el club que menos puntos ha conseguido sumar como local de toda la tabla, tan solo 15 de los 45 posible. También es el que menos goles ha materializado en su feudo, solamente 13 en las 15 jornadas disputadas en el Villamarín, dato verdaderamente preocupante.
Los de Juan Merino tienen un problema en faceta ofensiva para golear ya que es junto con el Levante y el Getafe el equipo que menos goles lleva, tan solo 28 dianas. El dato más curioso es que Rubén Castro ha anotado 16 de los 28 tantos del club, por lo que el ariete canario es una pieza fundamental en los esquemas del conjunto bético. Otra pieza clave en el puzzle de Merino es Musonda, el joven banda belga se ha convertido en una de las revelaciones de la liga y es un jugador a tener en cuenta por parte de la defensa levantinista.
La necesidad apremia al Levante, por lo que la visita al Villamarín puede llegar en un buen momento para los de Rubi que necesitan sumar como sea en un escenario, a priori y teniendo en cuenta los números del Betis, favorable para rascar puntos.