Los puntos vuelan de Anoeta y el equipo vasco acarrea su tercera derrota consecutiva
El Valencia CF consiguió la victoria ante la Real Sociedad en la séptima jornada de LaLiga Santander. Marcelino escogió para el encuentro su ya habitual alineación del 4-4-2. Con dicha alineación, el técnico asturiano consiguió aportar solidez en el mediocampo y desequilibrio por las bandas a través de los desbordes y las subidas de los laterales. Asimismo, llegó a realizar un triple cambio, cosa que es más habitual de un partido de pretemporada que de un encuentro de liga, y al final consiguió imponerse ante el conjunto guipuzcoano 2-3.
El mejor jugador del partido fue sin duda, Gonçalo Guedes. A pesar de que fue el último en incorporarse a la plantilla, el portugués ha demostrado desde el principio de la temporada su gran calidad. En Anoeta fue una pieza clave para que el conjunto ché consiguiera llevarse los tres puntos a casa, puesto que no solo asistió a Rodrigo en el primer gol y a Zaza en el tercero, sino que además realizó un despliegue físico impresionante y participó constantemente en el juego de la elástica valencianista.
Otra pieza fundamental fue Jaume Domenech, principal novedad en el once titular de Marcelino. Aunque encajó dos tantos por parte de los de Eusebio Sacristán, realizó muy buenas intervenciones ante los atacantes de la Real Sociedad. Por ello, se puede decir que llevó a cabo un partido extraordinario.
Durante los primeros quince minutos del enfrentamiento hubo un poco de desorden por parte de los dos equipos, ya que ninguno conseguía dominar el partido. Ambos cometieron algunos errores tanto defensivos como ofensivos. Concretamente, el Valencia se adelantó en el marcador tanto en el 0-1 como en el 1-2, pero la Real reaccionó de inmediato a los dos tantos del equipo blanquinegro. Asimismo, el conjunto vasco se quedó con un jugador menos en el minuto 67, tras la expulsión de Igor Zubeldia. Pero el Valencia no supo aprovechar la superioridad numérica y finalmente acabó también con diez jugadores en el terreno de juego, tras la expulsión de Kondogbia en el minuto 79. Sin embargo, resultó ser un encuentro muy dinámico, atractivo y entretenido, en el que reinó el ritmo y la intensidad.
Una de las anécdotas del encuentro es la lesión del técnico ché al celebrar el gol de la victoria como si de una final se tratase. Según el parte médico, Marcelino tiene una rotura fibrilar en su muslo izquierdo y está pendiente de evolución, pero la lesión no le impedirá seguir liderando al gran equipo que ha conseguido confeccionar con su gran esfuerzo y perseverancia.
El técnico valencianista no ha perdido nunca en Anoeta con sus respectivos equipos en los últimos 10 años. Una de las claves del asturiano para tratar de conseguir siempre la victoria son las rotaciones. Marcelino no tiene un once titular fijo, sino que va rotando a los jugadores en función del trabajo que realizan en las sesiones preparatorias. Uno de sus requisitos para ser titular es dar el máximo en cada uno de los entrenamientos, es decir, recompensa a aquellos futbolistas que más se lo merecen por su esfuerzo en las preparaciones físicas. Sin embargo, el técnico ha manifestado que tiene mucha suerte de disponer de un equipo formado por grandes profesionales y ha reconocido que está muy satisfecho con el trabajo que está llevando a cabo toda la plantilla.