Taxativo y contundente se mostró Morales cuando se le cuestionó por el estado de Mendilibar. El jugador salió en defensa del técnico de manera inmediata.
“El equipo está a muerte con él. Es verdad que lo que marca la situación del entrenador son los puntos, pero estamos con él”. El atacante aboga por reconducir la situación creada y asumir responsabilidades. “Yo creo que hemos tenido rivales muy buenos que van a estar peleando en la parte de arriba. Todos sabemos que hay que sacar esto adelante pero empezando por nosotros, no se le puede achacar toda la culpa al entrenador”, matizó al concluir el entrenamiento matinal en Buñol.
Morales confía en la capacidad de reacción del grupo. En su mente únicamente se dibuja la posibilidad de conseguir un triunfo redentor. Se trata de presentar el contexto que enmarca la cita en Eibar del próximo sábado, un club con pasado desde un prisma personal tras su estancia en las filas armeras el pasado ejercicio. “No tenemos ansiedad, tenemos ganas de conseguir tres puntos y que se acabe este mal trago con el que hemos empezado y luego descansar de la mejor manera posible durante la próxima semana para tener a la mayor parte de la plantilla en las mejores condiciones para recibir al Real Madrid en el Ciutat”.
El futbolista madrileño, uno de los héroes del ascenso histórico logrado por la sociedad armera al marco de la Primera División, diseccionó las cualidades y singularidades del Eibar. “Prácticamente el noventa por ciento del once que está sacando el entrenador son amigos desde hace dos o tres años, es un equipo muy compacto. Se está notando que se conocen bastante bien y que el entrenador le mete una intensidad que es la que se nota en el campo. Es un equipo que le mete un ritmo muy intenso al partido, que sobre todo busca la referencia de Arruabarrena y coger las segundas jugadas, ir directo a la portería y crear peligro”.