El sueño de todo aficionado a los envites y al deporte es obtener grandes ganancias con su disciplina favorita. Si bien se trata de una meta difícil de alcanzar, no es imposible. De hecho, los apostantes profesionales son capaces de cantar victorias de forma consistente gracias a una disciplina inamovible: aplicar una estrategia ganadora de apuestas. Ésta puede ajustarse de acuerdo a la experiencia del usuario: principiante, intermedio o experto.
Dicho nivel de experticia va en consonancia con el dominio de cuatro fundamentos: manejar los fondos responsablemente, no apostar ebrio, investigar y entender las cuotas. Igualmente, todo apostante sensato sabe que un envite es una predicción con cierto margen de error, nunca es 100 % precisa. No obstante, la posibilidad de acierto aumenta significativamente si se toman en cuenta las recomendaciones explicadas a continuación.
Manejo de los fondos
El bankroll —manejo de la banca, en inglés— es el dinero destinado para las apuestas deportivas. En este sentido, las prácticas de juego responsable siempre instan a los apostantes a “estipular una cantidad que estés dispuesto a perder”. Es decir, los fondos para los envites nunca deben afectar otras cuentas personales (alquiler de vivienda, gastos de comida, educación…), por lo tanto, no es una tragedia cuando no se pierde.
Al mismo tiempo, un apostante siempre necesita mantener una actitud positiva, aunque sin dejarse llevar por el fanatismo o la ingenuidad. En otras palabras, el apostador efectúa su envite con el pensamiento de que va a ganar porque ha investigado, conoce las cuotas y maneja su dinero responsablemente. Ésto último generalmente representa del 1 al 5 % de los ingresos totales de una persona y se divide en semanas.
Ejemplos de manejo responsable de fondos
Un trabajador de la construcción en EE. UU. gana un promedio de 50.500 dólares anuales. El 4 % de ese monto sería de 2.020 US$. Entonces, si este obrero desea hacer envites durante la fase regular de la NBA debe tomar su bankroll y dividirlo entre las 19 semanas que dura la temporada. En consecuencia, el apostador está en capacidad de apostar 106 US$ por semana.
En el caso de otros deportes, el cálculo queda de la siguiente manera:
- NFL: Bankroll ÷ 18 = 112 US$;
- Grandes Ligas de Béisbol (MLB): Bankroll ÷ 26 = 77,6 US$;
- UEFA Champions League: Bankroll ÷ 13 (fase de grupos + eliminatorias directas + final) = 155 US$.
Apostar sobrio
Es una cuestión de sentido común. Una persona ebria no está capacitada para decidir sus apuestas con el mejor juicio posible. En realidad, un apostador bebido es presa fácil de sus propias emociones y carece de la objetividad indispensable al momento de evaluar sus opciones. Tampoco es aconsejable entrar al sitio de apuestas con un estado emocional alterado (triste, desmotivado o enojado) que propicie decisiones apresuradas.
Del mismo modo, el apostador debe mantener la compostura en todo momento para no exceder los montos de bankroll establecidos. En este punto, las rachas ganadoras (causantes de exaltación) o perdedoras (que impulsan a algunas personas a hacer envites extra para “recuperar la inversión”) son irrelevantes. Al fin y al cabo, el objetivo principal de las apuestas deportivas es lúdico; no vale la pena un riesgo adicional.
Investigar
Probablemente, la investigación representa la parte neurálgica de una estrategia ganadora de apuestas. Aunque apostar “por intuición” puede resultar por un tiempo, no es una táctica que produzca victorias sostenidas a largo plazo. En concordancia, es indispensable hacer la tarea antes de tomar cada decisión relacionada con un envite, lo cual, incluye revisar estadísticas, identificar tendencias y analizar los precedentes del partido en cuestión.
Asimismo, recabar información (en artículos web o en canales de YouTube) de expertos en la materia suele ser bastante útil. Adicionalmente, en los últimos años los sportsbooks han desarrollado aplicaciones móviles y herramientas digitales para apoyar a los apostantes cuando buscan los envites más favorables. Dichas innovaciones aportan —entre otros— los siguientes datos:
- Las elecciones predilectas del día elaboradas por apostadores expertos;
- Las escogencias realizadas por la inteligencia artificial;
- Calculador de cuotas.
No depender de un solo sitio de apuestas y entender las cuotas
Los apostadores más experimentados siempre se aseguran de comparar cuáles sitios de apuestas ofrecen las mejores cuotas para el mismo evento deportivo. Además, es necesario tener en cuenta que no importa si una web ofrece cuotas muy favorables hoy… tal vez mañana otro corredor ofrezca más ventajas. Cuando se escogen las mejores líneas en los sitios más convenientes, el ahorro de dinero es mayor y el monto apostado puede subir.
Por otra parte, es necesario entender qué son y cómo funcionan las cuotas. Éstas representan la probabilidad de que se produzca un resultado determinado. Específicamente, el valor de la cuota es utilizado como divisor ante el 100 % de oportunidades. Por consiguiente, si la cuota de un equipo en un evento dado es 2.00, significa que tiene una probabilidad del 50 % de victorias (equivalente a lanzar una moneda al aire).
Recomendaciones adicionales
- Identificar —con el apoyo de una aplicación móvil o de una página web especializada— cuáles son las mejores apuestas disponibles;
- Pensar siempre en el largo plazo;
- No confiar en trucos ni en ofertas engañosas cuyo objetivo es conseguir que el cliente gaste más dinero del necesario.
- Hacer un inventario de herramientas digitales y de aplicaciones móviles que puedan contribuir a tomar las mejores decisiones al momento de apostar;
- Anotar las predicciones que se efectúan semana a semana con su respectivo resultado;
- Apostar a favor y contra el público;
- Buscar alternativas para apostar en vivo.
Errores más comunes con las apuestas deportivas
- No explorar distintos sitios de apuestas;
- Manejo irresponsable de los fondos;
- Mantener expectativas poco realistas;
- Hacer apuestas en demasiados lugares;
- Apostar siempre en favor del equipo favorito (carecer de objetividad);
- Realizar apuestas ciegas;
- Ignorar las estadísticas y no tomar en cuenta las cuotas;
- Prescindir de una estrategia de apuestas orientado hacia el largo plazo;
- Perseguir pérdidas aún después de agotar el monto establecido para las apuestas de esa semana;
- No retirar las ganancias;
- Apostar siempre en los mismos mercados;
- Carecer de registro y/o historial de apuestas.