Mamardashvili: seguro. Detuvo la ocasión más clara del Athletic a Iñaki Williams cuando se plantaba solo en el mano a mano. Aguanto perfecto al delantero y pronto llegaron las ayudas.
Foulquier: aprobado. Impreciso en la toma de decisiones, pero contundente en defensa. Tiro de oficio en la segunda mitad para llevar al Valencia a la final de Copa.
Diakhaby: excelente. Jugó fácil, no se complicó y estuvo a un alto nivel en defensa. Probablemente el mejor partido del central en lo que va de temporada.
Paulista: correcto. La vuelta en Mallorca del hispanobrasoleño fue buena, y hoy a demosatrdo que es un central muy válido para aportar en el tramo final de temporada.
Alderete: contudente. El paraguayo estuvo perfecto al corte en todas las acciones que disputó. Quizás un poco desacertado en el momento de entregar el esférico, pero cuajó un buen partido.
Gayà: coraje. El capitán forzó y fue de la partida. En el minuto 33 los isquios dijeron basta y tuvo que se sustituido por Lato.
Carlos Soler: corazón. No fue el mejor partido del centrocampista, pero supo manejar los tempos del partido. En la celebración se pudo ver la alegría que supone para un jugador de la casa jugar una final.
Ilaix Moriba: de menos a más. Arrancó el partido con perdidas y dubitativo. No cuajó una buena primera parte, pero la segunda supo estar a la altura de lo que el míster le pedía.
Bryan Gil: desequilibrio. Como siempre puso la puntilla en el partido, encaró, corrió y lo dejó todo hasta ser sustituido. El andaluz ha caído de pie en Mestalla.
Guedes: deferencial. Con un derechazo desde la frontal puso la guinda para dar el pase al Valencia a la final. El portugués estuvo asociativo.
Hugo Duro: trabajador. El ‘19’ se mató a correr y pelear con la defensa del Athletic. Se desfondó por el equipo hasta el final.