En los últimos días, los de Orriols han firmado a dos hombres que han sido importantes en la zaga en la última parte de la temporada
Tras intensos días de negociación, el Levante ha conseguido por fin, retener a dos futbolistas capitales en el tramo final de la campaña. Erick Cabaco y Coke serán levantinistas hasta el año 2022 después de llegar a un acuerdo con sus clubes de procedencia. Dos operaciones en las que la entidad que dirige Quico Catalán ha desembolsado mucho dinero para mantener estas dos apuestas en Valencia.
En el caso del central uruguayo, Tito Blanco, director deportivo del Levante UD, accedió a las pretensiones del Nacional de Montevideo de abonar algo más 2 millones de euros por el 70% de los derechos del central. Los granotas ejercieron su opción de compra no obligatoria que expiraba el 30 del pasado mes de junio. Cabaco, que ha disputado 18 partidos con la elástica blaugrana entre Liga y Copa en su primera temporada, no empezó con buen pie en Orriols a las órdenes de Muñiz, pero con Paco López ha sido uno de sus hombres fijos en el once titular.
Con Coke, la negociación ha sido un poco más complicada. En el contrato de cesión no exisitía una opción de compra y el Schalke 04, aprovechándose de la situación, ha sido duro de roer durante todo el proceso de su contratación. Tras un tira y afloja con el conjunto germano, el lateral madrileño llega a cambio de un millón de euros más unas cantidades sujetas a variables que no superan los 500.000 euros. El jugador de 31 años jugó 17 partidos desde que llegó en el mercado de invierno, siendo prácticamente indiscutible tanto para Muñiz como para Paco López.
