La frustración ha inundado el campo del Collao tras el 1-1 final entre Alcoyano y Real Unión. Ese ha sido el resultado que marcaba el electrónico también a la conclusión de la primera mitad, a pesar de la clara superioridad blanquiazul imprimida sobre el terreno de juego, incluyendo dos balones a la madera. El delantero Raúl Alcaina ha adelantado a los locales con un tempranero gol en el minuto 6, pero a la media hora de juego Lillo ha metido el balón en propia puerta tras un desafortunado despeje en la que ha sido prácticamente la única aproximación de peligro del cuadro vasco en todo el encuentro. Con el punto de hoy, el Alcoyano tan solo saca dos de seis en estas dos jornadas consecutivas en el Collao y se complica la vida de cara a certificar la permanencia en el grupo 2 de Primera RFEF.
Diferencia abismal la que se ha visto en el primer acto entre los dos contendientes del duelo. Un Alcoyano con ganas de ir a por el partido desde el principio, con un once muy ofensivo que ha juntado a Juanan, Moyita, Liberto, Armental, Agüero y Alcaina, trenzando jugadas verticales, ganando las disputas, y rematando con peligro en varias ocasiones. Y por otro lado, un Real Unión sin ningún criterio a la hora de hacer circular el balón, despistado y lento en defensa, sin automatismos visibles en campo contrario, y con imprecisiones de equipo destinado inevitablemente al descenso. Pues con todo ello, el electrónico marcaba un 1-1 al descanso.
Un empate que era como una victoria para el conjunto visitante por lo visto sobre el terreno de juego. Y esa victoria simbólica la han sabido retener los de Iñaki Goikoetxea, quien espera sacar dos victorias en los dos partidos de casa para hacer bueno este punto obtenido en el Collao y poder optar a la salvación. Porque lo cierto es que la falta de pegada y de profundidad de los de Parras en la segunda mitad, bastante peor que la primera, no ha ido acompañada por un incesante ímpetu visitante de ir a por los tres puntos, y el Real Unión Club de Irún se ha certificado como uno de los peores conjuntos que han pasado por el Collao esta temporada. Y repetimos que, aun así, el premio ha terminado siendo un punto para cada uno, igual que la semana pasada ante La Nucía, por lo que el balance de estas dos últimas jornadas seguidas es rotundamente negativo.
Hoy no han podido empezar mejor las cosas para los intereses locales. Un mal despeje en defensa lo ha aprovechado Raúl Alcaina para cazar el esférico y batir por bajo al guardameta Irazusta. Era el minuto 6 y el Alcoyano ya mandaba 1-0. Un tanto que le ha venido muy bien, porque antes del cuarto de hora Agüero y Moyita ya habían probado desde la frontal con dos buenos disparos que se han marchado fuera por poco. En los minutos siguientes, el Alcoyano ha seguido dominando ante un rival completamente superado en todos los aspectos, e incapaz de cortar las internadas blanquiazules en área contraria.
Pero el destino es caprichoso, y en el 31 de juego el lateral derecho Santos ha visto que tenía espacio para correr por su banda y ha puesto un centro que el lateral derecho contrario, Lillo Castellano, ha terminado desviando al fondo de las mallas tras fallar en el despeje. Auténtico jarro de agua fría que no ha colmado los ánimos locales, porque en los cinco minutos siguientes Liberto y Agüero han dispuesto de dos ocasiones clarísimas desbaratadas en ambos casos por el palo izquierdo de la portería defendida por Irazusta. Y a poco de llegar al descanso, Alcaina lo ha vuelto a intentar tras ganar en carrera a su defensor, pero Irazusta ha estado atento para enviar la pelota a córner. Finalmente, jugadores a vestuarios con empate a uno y sensación agridulce en el Collao.
Lo cierto es que tras la reanudación la cosa ha sido bien distinta. No porque el Real Unión haya aumentado sus prestaciones futbolísticas, sino porque ha salido con las nociones tácticas algo más claras mientras que a los de Parras se les ha ido acabando la frescura en los últimos metros y su superioridad se ha visto contrarrestada por su falta de profundidad. De hecho, un cabezazo franco de Liberto que no ha encontrado portería por muy poco ha sido la única oportunidad destacable del segundo acto.
Soler y Koke han entrado desde el banquillo para darle más velocidad a las bandas, pero sus internadas han resultado infructuosas a la hora de encontrar rematador. Mientras tanto, el cuadro guipuzcoano no titubeaba cuando se requería cortar un ataque con una falta táctica y posterior tarjeta amarilla. Especialmente descarada ha sido una de Iván Pérez a Koke cuando este arrancaba en campo contrario. Mucha falta e interrupción pero solo tres minutos de tiempo añadido, y gracias que el colegiado ha decidido pitar el final cuando el Real Unión se disponía a contraatacar con peligro. Finalmente, resultado de 1-1, dando las gracias, y rezando para que estos cuatro puntos que se han perdido en estas dos jornadas seguidas en el Collao no terminen pasando factura al Alcoyano de cara a lograr la permanencia.
Con el de hoy son 44 puntos a falta de tres jornadas por disputar: Bilbao Athletic en Lezama, Real Murcia en el Collao, y Nástic de Tarragona en el Nou Estadi. Especialmente vital es el choque ante el filial rojiblanco, porque es el más próximo y porque el rival ya está descendido. Lo cierto es que los de Vicente Parras siguen manteniéndose al margen del descenso, que se sitúa en 40 puntos, pero igual de cierto es que estas dos semanas no se han hecho los deberes en casa y parece que la agonía deberá prolongarse hasta el final. Esperemos que la espera valga al final la pena.
FICHA TÉCNICA:
Alcoyano: Miguel Bañuz, Lillo, Primi, Álvaro Vega, Pablo Carbonell, Armental (66’ Koke Sanz), Juanan, Moyita, Liberto (76’ Fran Miranda), Agüero (76’ Soler) y Raúl Alcaina.
Real Unión: Irazusta, Santos, Montoro, Iván Pérez, Parada, Bravo (85’ Marc Valés), Azkue, Aramburu (46’ Beobide), Nacho Sánchez (46’ Luque), Quique Rivero (74’ Jon Ander) y Gagua (74’ Andrada).
Árbitro: Usón Rosel (aragonés). Ha amonestado a los visitantes Santos, Beobide, Quique Rivero, Gagua, Iván Pérez y Jon Ander.
1-0 (min. 6) Raúl Alcaina. 1-1 (min. 31) Lillo, en propia portería.