Pedro Martínez Portero, tenista alcireño de 22 años, sumó su tercer triunfo en categoría ATP en lo que va del año. NOSTRESPORT ha tenido la oportunidad de dialogar con él y habló de su nueva etapa y de la gira sudamericana. Además asegura qué, fuera de los «big three», David Ferrer ha sido el mejor de todos.
Buenos Aires, Argentina (Corresponsal) | Este 2020 está siendo un gran año para Pedro Martínez. Ganó su primer partido en el cuadro principal de un Grand Slam hace poco en el Abierto de Australia, en donde superó al alemán Dominik Koepfer en la primera ronda y luego cayó con el cuarto preclasificado, el ruso Danil Medvedev.
Un mes después, viajó a Córdoba y en el torneo serrano también avanzó en la instancia inicial luego de vencer al italiano Federico Galo. Una semana más tarde, aquí en Buenos Aires, superó la clasificación y le tocó jugar con el portugués Joao Domingues, Lucky Loser debido a la ausencia de Fernando Verdasco por lesión. El valenciano nacido en Alzira, se hizo con el triunfo por 7-6 (0) y 7-5 y accedió a los octavos de final.
El alcireño, como el grueso de los tenistas españoles que eligen el calor del verano sudamericano durante el comienzo de la temporada, escoge disputar los distintos torneos de tierra batida para acomodarse en su juego y escalar de a poco en el ranking.
– Ha ganado en Australia, Córdoba y ahora en Buenos Aires ¿Cuál es el secreto de esta buena racha?
– El tenis es un deporte muy de racha, hay gente que gana partidos muy seguidos y luego tienen mala rachas. Cuando es así, hay que intentar que las cosas cambien, y cuando salen bien hay que intentar que sigan así.
El tenista de 22 años tuvo un gran 2019 en donde llegó a la final de Vilena, el Challenger que se desarrolla en la Academia de Juan Carlos Ferrero, pero cayó ante su coterráneo y campeón de la edición anterior, Pablo Andújar. Terminó el año pasado en el puesto 178 y con éste gran comienzo de temporada escaló hasta la posición 142 pese a no ganar ningún título como en Bastad durante 2018.
– ¿Sientes que estás en tu mejor momento?
– No sé si estoy en el mejor momento, pero definitivamente es muy bueno…
– ¿Cómo ha sido la transición de Jávea a Valencia y de los circuito Challenger al ATP World Tour?
– El circuito Challenger está muy, muy duro… muchos top 100 van a jugar estos torneos y les cuesta ganar mucho. Me he cambiado de Jávea a Valencia y he hecho una muy buena pretemporada, trabajando fuerte y la verdad es que está rindiendo sus frutos.
EL NIÑO QUE SOÑABA SER COMO FERRER
El tenista de la Comunitat ha cambiado de entrenador durante éste último tiempo. Antes, Martínez se entrenaba con Javi Ferrer, hermano del ex número tres del mundo y entrenador de la Academia que posee el ex tenista profesional alicantino. Ahora está bajo el ala de Daniel Gimeno – Traver y Sergio Gallego en la Academia Lozano-Altur.
– ¿Cómo te sientes en una nueva etapa?
– Me he sentido muy bien, ha tocado concluir mi etapa en la Academia Ferrer y ahora estoy en una nueva etapa muy bonita. Dani estará en Río conmigo y Sergio ha estado en Argentina, en Córdoba y Buenos Aires.
-¿Cuáles son los próximos objetivos para lo que resta del año?
– No me gusta marcarme objetivos, me gusta ir día a día, como diría el «Cholo» Simeone. La semana que viene toca Río y la otra toca Santiago, espero seguir con éste nivel…
Martínez acaba de lograr su primer triunfo en éste torneo, el Argentina Open, que en la presente edición cumple 20 años de vida. Pedro está empezando a ser uno de esos tenistas que son reconocidos aquí como Pablo Andújar, Albert Ramos – Vinolas o Nicolás Almagro y David Ferrer en su momento.
– ¿La gira sudamericana comienza a ser una cita ineludible en tu calendario?
– Es de los sitios más bonitos para jugar, el ambiente que se vive es espectacular y se vive como en pocas partes del mundo. Como los españoles en general, me siento muy cómodo en tierra batida. Además, tanto en Jávea en la Academia Ferrer como en Valencia con Dani y con Sergio, el esquema de juego es mucho más de tierra que de dura.
Mientras atiende a la prensa en la carpa de zona mixta, al lado del Court Central Guillermo Vilas, los pequeños de las escuelas de tenis aguardan afuera, corean su nombre y esperan ansiosos un autógrafo suyo o poder sacarse una selfie con él. Pedro no se olvida que alguna vez fue como uno de ellos y por eso le dedica un tiempo especial a cada fan, que aguarda con anhelo, ese contacto con el español.
– ¿Cómo te hace sentir que tantos niños te pidan autógrafos fuera de casa?
– Me gusta mucho, está muy bueno dedicarle un rato a los niños, yo recuerdo cuando era pequeño y me hacía mucha ilusión.
– ¿Quién era ese tenista con el que soñabas sacarte una foto o pedirle un autógrafo?
– A David Ferrer cuando era pequeñito, a Rafa Nadal y a casi todos los españoles. A todos con los que me he podido encontrar, siempre me he sacado una foto con ellos.
– Y ahora como profesional… ¿Con quién te llevas mejor?
– Con Pablo (Andújar), Albert (Ramos), Marcel (Granollers), Marc (López) y con David (Ferrer) cuando estaba en la academia, son todos amigos y compañeros. También soy muy amigo con Jaume Munar. Son los más cercanos. Siempre es un placer estar y coincidir con ellos.
No hay dudas. Siendo de Alzira, Pedro ha crecido y ha soñado con ser como David Ferrer a pesar de tener a Federer, Nadal y Djokovic en la cima cuando él se desvelaba imaginándose como un tenista profesional. El gladiador de Jávea ha sido su referente desde siempre y su modelo a seguir. «Si Federer, Nadal y Djokovic son de otro planeta, yo soy el número uno de los seres humanos» dijo alguna vez el «Hombre de hierro» cuando disputaba un Argentina Open. Pedro no lo duda: «Siempre quise ser como como David Ferrer, es el mejor de los humanos». Aunque para él, también Ferrer siempre será de otro planeta.
