El pasado sábado, en el Estadio de la Cerámica, se vivió uno de los peores momentos que se pueden presenciar en un campo de fútbol. La grave lesión de Ilias Akhomach silenció a los cerca de 18.000 aficionados que ocupaban los asientos del feudo ‘groguet’. Los peores presagios se confirmaron, y el club anunció en un parte médico la rotura completa del ligamento cruzado anterior y un esguince del ligamento lateral interno de la rodilla derecha. Además, en ese mismo encuentro, Kiko Femenía tuvo que abandonar el terreno de juego en el minuto 23 debido a un problema muscular en los isquiotibiales. El lateral alicantino ha sido sometido a pruebas para determinar el alcance de su lesión, aunque aún no se conocen los resultados.
En un fin de semana donde la enfermería volvió a llenarse, la mañana del lunes trajo una buena noticia, el regreso de Gerard Moreno a los entrenamientos con el grupo. Marcelino García lo adelantó en rueda de prensa el pasado viernes: «Gerard se va a integrar, si todo sigue con normalidad, la próxima semana con el grupo». Sin retrocesos en su proceso de recuperación, el máximo goleador del equipo volvió a pisar el césped de Miralcamp junto a sus compañeros durante la sesión matinal, con un objetivo claro en mente: regresar el 24 de noviembre en Pamplona.
No obstante, la situación de Gerard Moreno invita a la cautela. Diversos antecedentes de recaídas le preceden, siendo la más reciente el pasado mes de octubre, cuando, al igual que ahora, tras un parón internacional volvió a entrenar con el grupo. La ilusión por su regreso se vio truncada entonces por un nuevo contratiempo que le impidió continuar con normalidad. Desde el club aseguran que están haciendo todo lo posible para recuperar definitivamente al atacante ‘groguet’ y confían en que esta vez sea la definitiva.
