El tándem Tito-Muñiz se está revelando como un gran acierto del Levante Unión Deportiva en esta campaña 2016-17. De esta manera el tan ansiado retorno a la élite está más cerca.
Los fichajes han sido oportunos, con el estilo que se quería implantar, y el timón parece que está bien aferrado y en la dirección correcta. Portería sobria, defensa rocosa, medular infranqueable y ataque en forma y con ganas. Nada de estridencias ni fuegos artificiales.
La llegada del sentido común y la tranquilidad que aporta el Director Deportivo de la entidad, y su equipo de trabajo, sumada a la manera de actuar del técnico promete dar frutos en Junio.
Después de casi 20 años, el cambio de estilo en la parcela deportiva parecía perentorio. Y los resultados están dando la razón a esa tendencia.
No va a ser un entrenador de grandes revoluciones tácticas ni de cambios ni virajes extremos. Solidez y tranquilidad, esa es la divisa.
En un fútbol como el de la Segunda División, este parece el camino más fiable para conseguir el anhelado ascenso.
