Se acercan las galas de premios y con ellas se apilan los estrenos de las principales producciones que por su supuesta calidad acumulan nominaciones y reconocimientos de la crítica. En este artículo destacaré un par de ellas que he considerado dignas de recomendación ¿Cuales? Pues respuesta muy sencilla, por un lado un thriller de curas dentro del seno de la Santa Sede y por otro un filme de animación sobre animales mudo letón… Casi nada. Como diría Fran Perea “¿Quién me lo iba a decir?”. Hablamos de Cónclave, Flow y de sea como fuere una buena etapa del año para acudir a las salas de cine.
Cónclave
Iniciando con la presentación y síntesis de Cónclave, esta es una película de producción británica que roza las dos horas de duración dirigida por el alemán Edward Berger el mismo que llevó a la pantalla una miniserie en 2018 bastante aplaudida llamada “Patrick Melrose” protagonizada por Benedict Cumberbatch o quien más recientemente lideró el remake germano de Sin Novedad en el frente hace apenas un par de años.
Cónclave así misma está escrita por el británico Peter Straughan en base a la novela homónima de Robert Harris que dice ser bastante recomendable. Su reparto lo conforman una serie de actores como Ralph Fiennes, Stanley Tucci, John Lithgow e Isabella Rossellini entre otros quienes lógicamente cumplen con las exigencias de un guión marcado por la reunión de cardenales lo que implica gente de mediana/avanzada edad y mucha masculinidad a excepción de Rosselini.
La acción del presente filme de ficción que versa entre el drama y el suspense tenso que brinda el hecho de tener que tomar una decisión importante, da comienzo cuando el núcleo duro de la Santa Sede se ve azuzado por una noticia de relevancia mayor en forma del repentino fallecimiento del Sumo Pontífice es decir, el Papa ha muerto y en consecuencia la cabeza de la iglesia católica necesita ser reemplazada, en sentido literal y figurado.
La dirección de este complejo proceso de elección recae en el cardenal Lawrence representado por Ralph Fiennes, sin duda el protagonista de esta película, quien tendrá que asegurarse de que este procedimiento se pueda llevar a cabo correctamente y que el candidato elegido sea merecedor de tal responsabilidad.
Las opiniones opuestas sobre la posición que la Iglesia Católica debe tomar en cuanto a la política mundial e interna como institución, los diferentes tejemanejes y trapos sucios vertidos sobre algunos candidatos o la aparición de un peculiar miembro nuevo del Cónclave recién llegado de Afganistán completan el grueso de una trama que inicia con un ritmo lento pero que depara un nudo y desenlace más que entretenido.
Desde mi punto de vista he de reconocer que Cónclave me agrada bastante. Es un thriller muy bien construido desde su guión con unos diálogos bastante interesantes y bien ambientado por medio de una fotografía y montaje impecables que refuerzan el sentimiento de contracción que pretende instaurar Berger a su obra y que en mi opinión funciona a la perfección.
Igualmente cabe admitir que como se ha mencionado anteriormente Cónclave es una película que avanza con una marcada lentitud en su primera mitad y que necesita de un voto de confianza del espectador ya que tiene una importante carga política y social en su argumento por lo que si buscáis acción o sangre será mejor que esperéis a la próxima de Dwayne Johnson o mejor aún de si es de Tarantino. En mi caso particular como antiguo estudiante de un grado universitario conocido como Ciencias Políticas me lo pasé genial con este juego de poder, artimañas y opiniones encontradas que en cierta medida exagera y dramatiza la película pero no creo que diste en demasía de la realidad.
Por último, en lo más concreto, es curioso como se ha elevado de esta película a una Isabella Rossellini que acumula entre otras una nominación como mejor actriz de reparto a los Oscars cuando apenas aparece durante 8 minutos en pantalla y habla en dos, en otras palabras tiene texto en un escena en toda la película… Pero que escena, desde luego muy disfrutable ver como una monja pone en su sitio a un comedor lleno de retores enfadados como niños.
En conclusión sencillamente considero que Cónclave es una película bastante redonda que funciona tanto en su forma como un completo thriller como en su fondo mediante un guión inteligentemente hilvanado que retrata a la perfección las dos grandes posturas ideológicas de la sociedad actual y que da mucho juego para el debate posterior al visionado además de un desenlace tan inesperado como criticado que yo personalmente sí que compro.
Flow
El caso de Flow es el de una película muy peculiar y en consecuencia original que tiene en un gato mudo, pixelado y que desarrolla habilidades para la natación como su protagonista. Parece extraña pensarás y si te digo que sus compañeros son un perro, un jabalí, un lémur, un ganso y un cetáceo gigante ¿Qué me dices?… Pues así es Flow.
Hija plena de su creador el director letón Gints Ziibalodis quien no solo la dirige sino que también la escribe, produce y gestiona la fotografía de la misma un do it yourself en toda regla que dirían los anglosajones o un Juan Palomo en la versión castellana (cada uno que elija la que más le guste) lo cierto es que el guiso le ha salido bastante bien.
La ficción se sitúa en un planeta tierra que vive un situación climática compleja en la que nuestro gato tratará de sobrevivir como puede y en el camino hará estos curiosos amigos con los que llega a embarcarse en su propia Arca de Noé en un momento dado de la película con el objetivo de sobrellevar la meteórica crecida del nivel del agua.
Pese a la cuasi apocalíptica situación climática en la que tiene lugar Flow cabe comentar que esta es una película bastante brillante en lo visual y muy naturalista en su composición. En resumen es una especie de Vida de Pi pero sin Pi (ni el número matemático siquiera) menos violenta, con un ritmo no apabullante pero si constante de acción y drama bastante apreciable.
En mi humilde opinión de experto Flow es una película bastante completa que desafía al espectador ya que no es usual aceptar el visionado de un filme sin diálogos y que solo cuenta con el ruido gutural de los animales pero que sin embargo siempre mantiene el interés por el mundo de aventuras casi de videojuego que propone y el sentir humanista sin humanos que destila de trasfondo de la cinta.
Además en lo estético tiene una cualidad que valoro mucho en la animación que es la originalidad. Cabe recordar, a riesgo de ponerme muy pretencioso en este apartado, que la animación en la base no es más ni menos que dibujos animados y que por lo tanto es conveniente valorar esos dibujos y esa apariencia como quien va a un museo y se fija como es lógico en la técnica pictórica del autor, punto en el cual Flow es especial ya que es capaz de crear su propia marca estética difícil de asemejar con ninguna otra producción lo que es un gran punto a favor como película de animación.
Asimismo, Flow engancha en gran medida porque te la crees, las interacciones y los movimientos de los animales, a excepción del jabalí que no obstante es mi personaje favorito pero es cierto que demuestra una inteligencia y empatía que no es ni medio normal, el resto son muy realistas.
Por ponerle alguna pega echo en falta que la película tome algun riesgo más allá de sus dos pilares fundamentales pero quizás sea mejor así ya que como historia de aventuras muy visual y con un trasfondo humanista por el que se ensalza la colaboración social y la aceptación del diferente que no es poca cosa, tenemos suficiente.
En fin, Flow y Cónclave, Cónclave y Flow de lo mejor de este año y mucho más todo junto en las salas actuales de cine. What a time to be alive?