Héctor Rodas dialogó con la prensa luego de la goleada ante el Almansa en el cotejo amistoso. El central pide pista para entrar en el once inicial y reclamar la cinta de capitán debido a su pura sangre granota.
Levante UD | Era un partido amistoso aunque esa condición se borró de la faz del Estadio del Almansa desde que el balón echó a rodar al filo de las ocho y media de la tarde. A esa hora, y en tierras manchegas, Héctor Rodas se ceñía el brazalete de capitán para instalarse en el eje de la zaga granota. Pese al carácter preparatorio de la confrontación, no era un encuentro más en la agenda del zaguero. Sometido a un prolongado ostracismo, después de una inoportuna lesión que llegó en los estertores del ejercicio pasado, el defensor regresó a las trincheras y cavó un foso inaccesible para el resto. Y lo hizo con mucha fuerza y con síntomas inequívocos de máximo convencimiento en sus posibilidades. “Este año tengo muchas expectativas. Tenía muchas ganas de empezar a trabajar con el grupo. Quiero demostrar que puedo ser titular”, advirtió a la conclusión del entrenamiento matinal en Buñol.
Héctor puso sentido a sus emociones e impresiones tras anclarse de nuevo en el interior del pasto verde con la elástica del Levante y disputar los primeros cuarenta y cinco minutos del enfrentamiento. “Tuve muy buenas sensaciones. Tenía mucha ilusión y muchas ganas de volver a jugar un partido con los compañeros”. Es evidente que la lesión producida está totalmente desterrada de su cabeza. Ha sido una prueba compleja ya que “pasas malos momentos. Tienes muchos entrenamientos en solitario”. Hay un aprendizaje detrás de esta desventura. “Esto te hace ser más fuerte”, pero todo el infortunio forma ya parte del pasado. “Me encuentro muy bien físicamente y espero estar cuanto antes disponible para el míster”.
El central reflexiona sobre el presente más candente y se muestra partidario de dar un margen de confianza el bloque, pese al complicado arranque en la competición liguera tras los choques ante el Villarreal y Athletic Club. “No debemos volvernos locos”, resalta. Su discurso es analítico y acentúa una idea de continuidad con respecto a esa versión granítica que caracterizó al colectivo azulgrana en el pasado. “Hemos sufrido dos derrotas ante los rivales más fuertes de la categoría. Este equipo tiene el mismo espíritu y ganas. Vamos a conseguir cosas positivas”. Y en su mente se ilumina la cita de la Liga BBVA en Málaga. “Iremos con la idea de competir. Aunque será un partido complicado vamos a ir con toda la energía para intentar sacar algo positivo de allí”.
