El partido de esta noche a las 21:00 en la Fonteta se antoja definitivo para el devenir de Valencia Basket en la EuroLeague. Una derrota dejaría prácticamente sin opciones a los de Jaume Ponsarnau.
Compromiso serio el que afrontará Valencia Basket en el día de hoy, que recibe a un Fenerbahce en racha en la competición continental. Tan solo una derrota (ante Anadolu Efes) en los últimos trece partidos para el equipo turco, que con esta racha consiguió solventar el mal inicio en EuroLeague. Los taronja apelarán a la épica, al espíritu y la competitividad de las grandes citas.
Distintas dinámicas para ambos equipos, ya que Valencia Basket empezó la competición de manera muy efectiva pero ha ido de más a menos, cayendo hasta el undécimo puesto. Un comienzo difícil para los turcos que ha mermado la constancia que no se queda fuera de los playoffs desde la 13/14. El encuentro de la primera vuelta en Estambul fue complicado. Fenerbahce comenzaba a rodar, pero el esfuerzo taronja se impuso en un partido en el que Valencia Basket estuvo por detrás en el marcador hasta por diez puntos (al descanso) y a siete puntos durante el último cuarto. Aquel día, el siempre destacado Van Rossom impulsó al equipo hacia la victoria con veinte puntos y cinco asistencias.
No solo las rachas han cambiado y se han invertido, sino que Fenerbahce podrá contar con Nando De Colo, que se perdió ese partido por lesión, y además ha realizado dos grandes fichajes provenientes de la NBA: Marko Guduric y Kyle O’Quinn. El base francés, uno de los mejores del continente y ex taronja, promedia quince puntos y cuatro asistencias, para un total de casi diecinueve de valoración. El francotirador Guduric realiza tan solo once puntos por partido, pero tiene una eficacia desde la línea de triple del 42%. Por su parte, O’Quinn no ha tenido un impacto como el del exterior serbio, con gran «culpa» de ello el también ex NBA Jan Vesely. El que fuera MVP de la EuroLeague en la 18/19 aporta trece puntos, cinco rebotes y dieciocho de valoración de media en cada partido. La conexión entre el checo y De Colo es, sin duda, una de las más temibles de la competición.
En dicha temporada, la última que se jugó de manera completa (la campaña pasada, la EuroLeague fue cancelada por coronavirus), el equipo turco acabó primero en la fase regular. Este año, además de con los jugadores ya mencionados, completan uno de los mejores equipos de Europa el también interior Duverioglu, que suele ser titular habitual en el equipo de Igor Kokoskov, el lituano Edgaras Ulanovas y, con mención especial a los dos jugadores más destacados del partido de la primera vuelta en Turquía, el alero canadiense Dyshawn Pierre (18 puntos y 5 rebotes) y el veterano base Ali Muhammed, que finalizó el encuentro en 16 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias y arrastra a su espalda una trayectoria más que aprobable en el equipo de Estambul (formó parte de la única consecución de la Euroliga de Fenerbahce, en la 16/17, año en el que era titular junto al mencionado Vesely y el ahora taronja Nikola Kalinic).
Valencia Basket contará de nuevo con todos sus efectivos, añadiendo también la reincorporación del base Guillem Vives, mas de un mes alejado del parqué por un proceso de lumbalgia. Esta alta en el equipo provocará que Jaume Ponsarnau deba realizar dos descartes para medirse al equipo turco. Habrá que ver si el técnico de Tàrrega deja fuera a Derrick Williams ante su ex equipo, un Williams que fue el mejor del Fenerbahce en su victoria de la temporada pasada en la Fonteta.
Pero si de precedentes hablamos, la cabeza estará en el día de hoy pero el corazón en 2011. En la memoria de los valencianistas estará aquel partido de Top 16 de hace ya diez años, en el que Valencia Basket consiguió meterse en los playoffs por primera (y única) vez en su historia, ganando en la Fonteta al Fenerbahce en la última jornada, en una gran noche para el equipo entrenando entonces por Svetislav Pesic. Hoy la Fonteta no podrá animar e intimidar como aquel día, pero la sensación de ganar o caer estará presente en la mente de los taronja.
