Si la semana pasada el Amics Castelló logró un triunfo de señorío en la pista del Tizona Burgos, ha vuelto a ocurrir lo mismo siete días después tras doblegar al Baloncesto Ourense, segundo clasificado de la tabla hasta la fecha y uno de los claros candidatos al ascenso a ACB. Fue una demostración de los discípulos de Fede Castelló a todos los niveles. Brilló el equipo, un grupo cohesionado, que trabaja duro, tiene ambición y sabe lo que quiere.
El conjunto local empezó el choque con un quinteto con potencial ofensivo, con prácticamente sus mejores anotadores sobre la pista, pero también con una buena actitud defensiva. Fue un buen arranque de los castellonenses, con una anotación coral, sumando puntos con sus hombres grandes, su perímetro y en transición. Esto se tradujo en un 14-8 para los de La Plana, pero ante un rival tan exigente como el Ourense, la mínima concesión se pagaba. Y así fue con tres triples seguidos de los gallegos, que establecieron el 14-17 en el luminoso. Los visitantes se mostraban muy certeros desde más allá de la línea de 6,75, ya que en ese momento llevaban una espectacular serie de 4 sobre 5. Fede Castelló pidió tiempo muerto y puso en pista más guerreros y rápidos en transición, una apuesta que dio muy buen resultado. De hecho, se produjo un parcial de 10-3 que arregló la situación, pudiendo así, pese a una posterior reacción gallega, llegar por delante en el luminoso al término del primer periodo (26-24), con superioridad igualmente en los rebotes (12-8).
El partido bajó revoluciones a continuación, con muchos ataques posicionales y un poco menos de anotación. El encuentro entró en una fase de intercambio de canastas que mantenía el marcador nivelado. Los triples, aunque ya no tanto, seguían siendo la principal amenaza del Ourense, el cual mejoró en el aspecto reboteador. Por su parte, el Amics buscaba la superioridad de sus interiores y más aún con los pívots visitantes bastante cargados de faltas. De hecho, se llegó a ver en pista algo muy inusual como es a Okouo y Ngom, los dos gigantes del equipo, compartiendo minutos de juego. De este modo, las espadas seguían en todo lo alto al descanso (46-47).
En la reanudación, los de Fede Castelló salieron con una defensa más intensa sobre los exteriores del cuadro ourensano, que eran el principal problema. Por otro lado, los locales seguían con un guion parecido, ya que Okouo hacía daño. Sin embargo, esto no era suficiente y en minuto 27 los gallegos dieron un pequeño estirón (59-64), por lo que salió Stutz para paliar el atasco ofensivo de los de La Plana, dando paso a los mejores minutos del Amics. La primera que tocó el norteamericano acabó en triple y la siguiente fue un espectacular mate de Ngom con tiro adicional que dieron la vuelta al marcador (65-64). A continuación brilló un sensacional Álvaro Martínez con 6 puntos consecutivos y parecía el momento del Amics para marcharse en el luminoso, pero un combinado de la entidad del Ourense sabe agarrarse a la pista y arañar puntitos en las dificultades, por lo que los de La Plana no pudieron apenas estirar su renta al término del tercer cuarto (72-68).
A medida que pasaban los minutos, las defensas se endurecieron y los puntos escaseaban, aunque el Amics mantenía sus pequeñas rentas, pero con el problema de que no eran para nada definitivas (72-68, min. 33). No estaba acertado el Amics, pero estaba sólido en defensa y en cuanto un gris Tate empezó a mostrar su mejor cara la cosa se puso bastante bien (82-73 a 4:29 del final). Faltaba rematar la faena. Entonces el Ourense puso su once de gala, con grandes tiradores en pista para intentar recuperar rápido su desventaja. Además, estaba la buena noticia de que los visitantes estaban en bonus ya y los anfitriones solo tenían una falta, por lo que se podía morder en defensa. En los ataques posteriores, el Amics resolvió muy bien gracias a sendas penetraciones de Arcos y Tate, rubricados por un oportunísimo triple de Arcos y posesiones más largas para consumir tiempo. El combinado gallego lo tenía harto complicado y quemaba todas sus naves con rápidos lanzamientos, especialmente con Moody, por lo que no había que confiarse. Sin embargo, era la gran noche de un soberbio Amics Castelló que no dejó escapar una merecida y grandísima victoria con la que da todo un golpe de autoridad que hizo disfrutar al máximo a sus seguidores.