Ante la visita del colista, el Rayo Vallecano, y la moral cogida con el gol en el último minuto en Los Cármenes contra el Granada el miércoles pasado, se esperaba una tarde plácida en Mestalla. Y es que este horario de las 16 horas es más propicio para la siesta que para el fútbol, pero es lo que hay. Además la conjura de Los Cármenes, donde toda la plantilla se ha hecho una piña ha sido importante para el resurgir, previsto, del equipo.
Las bajas han hecho daño en la confección de la alineación, porque prácticamente se pierde un jugador por línea y en la punta de ataque el único ariete puro con el que cuenta, de momento, Miroslav Djukic, el portugués Hélder Postiga. Además la importancia en el equipo de Ricardo Costa es creciente, como se observó en su acompañamiento relámpago al conjunto valencianista en tierras granadinas. En el entorno se esperaba la reacción de la gente ante el tema Adil Rami y si iba a haber cánticos especiales para el francés. Por su lado, el Rayo aparecía como víctima propiciatoria, farolillo rojo en la tabla, y con un juego que es muy bonito y apreciado si te acompañan los resultados ejemplo, año pasado, pero como vengan mal dadas aparecen los nervios y las críticas. La afluencia de espectadores no parecía muy esperanzadora por el horario de las 16 horas. Mario Alberto Kempes era la gran atracción del partido y demostraba que es el gran ídolo de la afición.
El Valencia empezó muy bien y tanto Pabón como Fede tuvieron dos ocasiones clarísimas, que el guardameta Rubén desbarató. Los rayistas llevaban una equipación fosforescente amarilla y verde que era tremenda. Sobre la media hora, los visitantes se estiraban con peligro. El meta Alves estaba lesionado para aguantaba el tirón, porque Guaita no estaba y el suplente era el chaval Jaume. Se notaba la falta del delantero centro y Pabón era el único que acompañaba al brasileño Jonas. Pese a la hora, se encendieron las luces del estadio y Diego Alves seguía con problemas en el golpeo.
Gol de Jonas
A los 37’ Jonas aprovechó un regalito de la zaga del Rayo, para golpear con violencia la bola, y se estrelló contra el poste batiendo a Rubén. Era el primero y se abría así la lata.
El Valencia estaba jugando bien, con un extraordinario Fede y Javi Fuego mandando en la zona ancha de manera imperial. Banega bien con Canales dominando el juego. En los minutos finales, el Rayo acusó el gol anotado por su inocencia defensiva y se notó tocado. Larrivey fue el más incisivo de los rayistas con su juego aéreo y un tiro al poste, anulado previamente. Sin duda la estrella emergente para la afición es Fede.
En la segunda parte siguió el debate de la portería, porque Alves quería aguantar todos los minutos posibles y eso conllevaba un riesgo. Mathieu sacaba los saques de portería para evitar riesgos, a la antigua usanza. Bernat y Pabón hicieron estragos por la banda izquierda durante la reanudación. Durante toda la segunda parte, Alves fue atendido muchas veces, pero no se hacía el cambio, y además todos los golpes se los llevaba. Feghouli tuvo el 2-0 en el descuento y falló. Los últimos minutos fueron de tensión por el resultado y por la inestabilidad de la portería. Pero el resultado no cambió.
Ficha técnica:
Valencia: Alves, Joao (Barragán 81′), Víctor Ruiz, Mathieu, Bernat, Javi Fuego, Ever (Míchel 76′), Fede (Feghouli 67′), Canales, Pabón, Jonas.
Rayo: Rubén, Arbilla, Zé Castro, Saul (Castillo 85′), Mojica, Baena (Bueno 74′), Trashorras, Lass, Adrián, Sebas Fernández (Perea 59′), Larrivey.
Goles: Jonas 37′ (1-0).
Árbitro: Fernández Borbalán. Amonestó a Baena 10′, Víctor Ruiz 15′, Joao 32′, Arbilla 43′. En la segunda: Fede 60′, Adrián 62′, Saúl 75, Ze Castro 79′.
Estadio: Mestalla. Sábado 16 horas.
Fotos de Dani Coar
