Comunicado oficial:
El motociclismo valenciano está, ahora mismo, en una situación nunca antes vista. En el 2025 no se han autorizado la celebración de carreras de Campeonatos de España en todo el territorio de la Comunitat. A pesar de que los Clubes pidieron en tiempo y forma a la Federación Española la realización de esas pruebas, sus actuales dirigentes decidieron borrar del mapa de un plumazo a todo el motociclismo valenciano.
Con esto, no solo se castiga a la Federación valenciana sino también a todos los Clubes y deportistas de esta Comunitat que han visto cómo los han dejado “tirados” y sin posibilidad alguna de poner su granito de arena para que el motociclismo de nuestro país siga siendo la referencia.
La cosa ha ido tan lejos que, hasta el propio Circuit Ricardo Tormo, todavía recuperándose de los destrozos que provocó la DANA en sus instalaciones, ha visto cómo la Federación Española ha puesto una cláusula abusiva por los derechos de MotoGP si no hacen el Campeonato de España de Superbike ESBK (que ellos mismos no autorizan por ser una prueba en territorio valenciano).
La sociedad valenciana continua en shock tras los desastres de la DANA y, como todo el mundo sabe, el deporte en general se vio muy resentido. Campos de fútbol destrozados, circuitos embarrados e impracticables, eventos suspendidos, pero como si de política se tratase, a la Federación española poco le importa lo que suceda en esta zona de nuestro país.
Otras Federaciones autonómicas han mostrado su apoyo y solidaridad con el motociclismo valenciano y están dispuestas a trabajar con nosotros para no dejarnos caer. La Federación valenciana, como no podía ser de otra manera, solo piensa en defender a sus clubes, a sus deportistas, a sus equipos y a su Circuito estrella, el Ricardo Tormo.
También, la Dirección General de Deporte de la Generalitat Valenciana mandó un escrito al Consejo Superior de Deportes alertándole de esta situación, pero no ha habido respuesta alguna. El CSD sigue dando muestras de su pasividad ante unos hechos tan graves, pues la decisión de dejar a la Comunitat sin Campeonatos de España está recurrida ante su Presidente desde el 13 enero de 2025, aún sin respuesta.
El CSD, tan preocupado por el fútbol que para manejarlo es capaz de desdecirse de criterios asentados y resoluciones previas, y que ha dejado pasar más de dos años desde que se aprobó en diciembre de 2022 la Ley del Deporte, sin ni siquiera iniciar el desarrollo reglamentario de la norma, es el mismo organismo que no adopta medida alguna cuando desde otros deportes se le requiere.
Siguen sin cumplir con el mandato legal de adaptar el seguro deportivo a la realidad y a lo que establece la Ley, de modo que las coberturas son las mismas que en 1993. No es el mismo problema, pero no se entiende que, si las coberturas de servicios sanitarios de los funcionarios por Muface son una prioridad, no lo sea el deporte ni los deportistas.
Parece que esta actitud de la Federación española, con la connivencia del CSD, está motivada en que José Luis Berenguer, actual dirigente de la FMCV, se presentó como candidato a presidente en las elecciones de la RFME de 2024 y, como los actuales dirigentes tienen otro candidato favorito, están castigando a todo el motociclismo valenciano.
Desde que arrancaron las elecciones, han utilizado todo el poder de la Federación para ayudar y apoyar a su candidato. Hasta la propia elección de la Junta Electoral fue hecha a medida. Ningún recurso presentado por la candidatura “no amiga” fue aceptada ni por la Junta ni por el TAD (Tribunal Administrativo del Deporte) en el que han ejercido alguna vez algunos miembros de ésta con anterioridad, por lo tanto, buenos conocedores del funcionamiento del órgano.
Dada la indefensión en la que se encontraba el candidato valenciano, éste acudió a los Tribunales para demostrar que el candidato “del régimen” era inelegible de acuerdo con la Orden Ministerial que regula las elecciones, por sus múltiples e incompatibles funciones relacionadas con el motociclismo. El juez le dio la razón a Berenguer y se pararon cautelarmente las elecciones.
El Auto de 17 de octubre de 2024 (adjuntado en este mismo email), que hace eso y condena en costas al TAD, es claro al afirmar que “El razonamiento de la RFME, acogido también por el TAD, nos parece un desacierto jurídico. Las instituciones también deben considerar la legitimidad social y el decoro con que deben desempeñarse, entendiendo que no basta solo con proclamarse dispuesto a cumplir fielmente la letra de las normas sino también respetar su espíritu”.
A partir de aquí, la RFME ha intentado echar por tierra hasta lo que la propia Justicia ha dicho en los Autos, pero es ésta la que la está dejando en evidencia resolución tras resolución, como la última, de 11 de febrero de 2025, en la que el Juzgado Central de lo Contencioso Administrativo nº 11 de Madrid determina “INADMITIR el incidente de nulidad de actuaciones y en consecuencia ordenar su archivo, por no concurrir los presupuestos legales que lo habilitan. Se condena a la RFME a las costas del incidente, con el límite expresado. MODO DE IMPUGNACIÓN: No cabe recurso”.
Todo este periplo judicial emprendido con entusiasmo por la RFME en favor de un candidato, se está costeando con un dinero que se debería estar empleando en el fomento del deporte del motociclismo y en el bienestar y la protección de sus deportistas.
La RFME, tradicional y sistemáticamente gobernada por “el grupo del 94”, esto es, quienes desde hace 30 años vienen ostentando cargos en el motociclismo español a nivel estatal y autonómico en distintas posiciones, no acepta que el deporte requiere de actualización en unos nuevos tiempos. Se ha quedado ese grupo tan obsoleto como las coberturas del seguro deportivo, que son de 1993, casi tan antiguas como ellos. Nuevos tiempos que requieren de otras formas, también en el deporte.
Queremos transmitir finalmente que, desde todo el bloque de Clubes, deportistas y cargos oficiales de la Comunitat Valenciana, solo deseamos que regrese el sentido común a nuestro deporte y que la dirección de nuestra Federación Española de motociclismo reconsidere su postura ante tan insoportable e injusta arbitrariedad.