Nicky Hayden hipoteca su actuación por un arranque discreto y Eugene Laverty se ve sorprendido por una molestia en los antebrazos.
Las temperaturas eran excelentes y el marco incomparable, pero Lorenzo no ha querido que hoy se viviera una carrera vibrante en Jerez, la capital mundial del motociclismo. Y es que cuando el mallorquín tiene las cosas claras es prácticamente imbatible. Había dominado casi todas las sesiones de entrenamientos, adjudicándose la pole con suficiencia y mostrando un ritmo superlativo, difícil de batir salvo sorpresa mayúscula. Y en la carrera no ha dejado margen para el error. Desde el puesto de honor de la parrilla tiraba contundentemente para dominar cada una de las 27 vueltas de la prueba de MotoGP. Márquez ha pretendido seguirle tímidamente, pero en la quinta vuelta Lorenzo ya amasaba siete décimas de ventaja, un colchón que iría aumentando hasta llegar a los cinco segundos y medio. Rompía la prueba prácticamente desde el inicio, mientras un mordaz Valentino Rossi intentaba alcanzar a Márquez y, después de lo acontecido en Argentina, la incógnita se apoderaba de la grada. Pero esta vez el italiano no conseguía enlazar con el español. Así las cosas, Lorenzo vencía merecidamente una carrera soporífera, en la que Márquez y Rossi entraban separados tras él, con la impresión de estar pensando ya en sumar los máximos puntos posibles de cara a la lucha por el campeonato.
Parecía que Nicky Hayden podría remontar en la carrera de hoy, partiendo desde la decimoctava posición pero, como comentaría el norteamericano posteriormente, su salida e inicio de carrera han sido lentos, porque le ha costado encontrar el ritmo en los primeros compases. Pasado el primer tercio de la prueba, el piloto POWER ELECTRONICS Aspar conseguía encontrar su sitio en pista para rodar de modo constante y, casi al final, ganaba una posición para concluir el decimoséptimo. Tampoco Eugene Laverty ha vivido su mejor jornada en Jerez. El irlandés encontraba una evolución muy importante durante la sesión de calentamiento. Y así partía a la carrera con mayor tracción en su montura, pero los cambios de geometrías realizados le sobrecargaban en exceso los antebrazos, comprometiendo su pilotaje. Y en el último tramo de la prueba las molestias le impedían desplegar su mejor pilotaje, de ahí que el piloto POWER ELECTRONICS Aspar concluyera en decimoctava posición.
